Sala de Prensa

30/06/2021

Principal unidad penal de mujeres del país, será parte del programa

Metropolitana Sur coordinó piloto penitenciario en cárcel femenina de Santiago

La implementación de una atención penitenciaria integral y universal,, que permita a todas las personas condenadas un acceso a los beneficios, prestaciones y sobretodo un respeto de sus derechos básicos, es el que persigue desde su génesis el nuevo Piloto de Defensa Penitenciaria que se implementa a partir del mes de julio de este año, en seis regiones del país, entre ellas el Centro Penitenciario Femenino de Santiago

Por Gustavo López Valeria
Defensoría Regional Metropolitana Sur

Reuniones de coordinación con los equipos penitenciarios, técnicos y profesionales de la Cárcel de mujeres de Santiago, antecedieron a la fecha de puesta en marcha del Piloto Penitenciario integral que desde el uno de julio se implementa en penales de seis regiones del país.

El trabajo penitenciario en las cárceles chilenas se desarrolla hacer cerca de 10 años , primeramente en un trabajo de representación a personas que se encentran en las postulaciones  las libertades condicionales, unificación de causas, traslados y beneficios intrapenitencioarios,, entre otros , lo que dejó en  evidencia un carencia del sistema penal con las personas condenadas y con quienes el trabajo no era sistemático.

En ese año 2011, los primeros programas de defensa penitenciaria abordaron las principales limitaciones que se evidenciaron, donde la atención se producía luego de la petición expresa de los internos e internas. Es esa forma de trabajo la que sufrirá un cambio conceptual desde este mes. A partir  ahora, se asegurará la atención del equipo penitenciario a toda persona recluida en una unidad penal, desde el primer momento en que ingresen a cumplir su pena.

Para el caso de la Región Metropolitana, el penal elegido fue el Centro Penitenciario Femenino (CPF) de Santiago, que se encuentra en la jurisdicción de la Defensoría Metropolitana Sur, razón por lo cual la Defensora Regional Loreto Flores y el equipo penitenciario han sostenido reuniones desde hace semanas con la autoridades regionales de Gendarmería y con el equipo del CPF.

La defensa penitenciaria está conformado por los defensores penitenciarios Mauricio de la Hoz y Keomara Henríquez  apoyados por los trabajadores sociales José Ramos y Carlos Duran, todos ellos coordinados por el abogado de la Unidad de Estudios Regional Mauricio Badilla

POSITIVAS IMPRESIONES DE INTERNAS
La Defensora Regional Loreto Flores destacó el compromiso de los equipos penitenciarios y el hecho que se la cárcel de mujeres de Santiago, - la principal cárcel femenina del país, con cerca de 500 internas- uno de los recintos pilotos, pues “ demuestra la importancia que las mujeres encarceladas representan para la Defensoría, cuando ellas viven una realidad muy distinta a la del resto de la población penal del país, lo cual ha sido documentado en innumerables ocasiones por estudios de centros académicos, Organismos No Gubernamentales (ONG) y por parte de la misma Defensoría,”.

“Siempre hemos dicho que las mujeres privadas de libertad son un grupo especialmente vulnerable, donde las que padecen esa privación, no sólo son ellas, sino toda la familia, en especial sus hijos e hijas menores de edad, que pierden el contacto directo, en especial en esta época de pandemia.”

La autoridad regional, refirió los buenos comentarios que el trabajo de la Defensoría ha suscitado entre las internas del CPF, lo que significa que gran parte de las solicitudes que se generan sean tramitadas por el equipo de la DRMS, situación que se verá incrementada en los próximos meses.

El modelo de atención estima una primera reunión en los primeros días del ingreso de la condenada al recinto penal , ocasión en que los profesionales de la institución sostendrán una reunión y le explicarán sus derechos y deberes dentro del penal, las posibilidades de beneficios y los servicios que les puede prestar la defensa pública.

Este plan piloto se desarrollará inicialmente en seis regiones: Metropolitana Sur, Tarapacá, O’Higgins, Maule, Ñuble y Aysén.

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