07/11/2008
Vuelco en caso de imputado por homicidio frustrado
Defensa logró establecer que herida se la produjo la víctima al dispararse accidentalmente en el estómago
Un vuelco en el caso de homicidio frustrado que se le imputó a Luis Alvarez V de 41 años, se produjo en los últimos días, toda vez que la víctima, la pequeña D.E.F. de 10 años, cambiara la versión de los hechos que inicialmente había declarado, liberando de responsabilidad al imputado.
El hecho se remonta a abril de 2008, cuando -de acuerdo con la versión de Fiscalía- el imputado llegó al departamento de su ex pareja y madre de la niña en la Población El Volcán II en Puente Alto, con la intención de vengarse, por rencillas anteriores. Sin embargo, la bala destinada a la mujer, hirió a la pequeña en su abdomen, acto seguido el sujeto se dio a la fuga siendo detenido a las pocas horas por la Brigada de Homicidios (BH). Así, el sujeto que había recuperado su libertad hacía sólo pocos días volvió nuevamente a quedar tras las rejas.
La versión de la defensa difería sustancialmente de las indicadas por las víctimas, toda vez que se puedo establecer –tras la reconstitución de escena y confesión de la víctima- que el sujeto habría llegado armado al domicilio, ante lo cual la madre de la menor lo obligó a descargar el arma, a lo cual accede Luis, no percatándose que había quedado una bala en el carro del arma. La menor manipula el arma, escapándosele accidentalmente el disparo que le perforó el intestino delgado.
La Fiscalía reformalizó en los últimos días al imputado, esta vez como autor de cuasi delito de lesiones, en especial por la negligencia de dejar el arma al alcance de la menor y no descargarla completamente.
La defensa del imputado, a cargo de los defensores penales Juan Pablo Gómez y Ximena Silva, lograron que el Tribunal aplicara medidas cautelares del artículo 155, logrando la libertad de Luis Alvarez, tras seis meses en prisión preventiva.
En la ocasión, la abogada Silva destacó el actuar de la defensa, toda vez que exigieron durante todos estos meses la realización de la reconstitución de escena, entrevista y ratificación de las declaraciones de las víctimas, las que terminaron por reconocer la el falseamiento de la primera declaración, aparentemente motivados por presiones familiares.
