Sala de Prensa

18/06/2009

Francisco Geisse Graepp: "La calidad de la justicia no se puede transar"

Defensor Regional es crítico con las audiencias express y también con la facilidad que se otorga la prisión preventiva. Sin embargo, reconoció que se ha producido un aumento explosivo de causas y que eso tensiona el sistema.

Por Marcelo Galindo Gallardo. Fotos Cristian Duarte Aros (Reportajes El Llanquihue). La defensa en la actual Reforma Procesal Penal es una de las labores más complejas. Qué abogado no ha recibido fuertes epítetos e incluso intentos de agresión en plena audiencia, cuando se trata de defender a los llamados “delincuentes”.

Pero la tarea de buscar atenuantes para las personas que son imputadas por distintos delitos es parte del proceso. De hecho, para Defensor Regional, Francisco Geisse Graepp un tema para reflexionar es el alto número de imputados inocentes que han estado en prisión preventiva.

A nivel nacional durante el 2008 hubo 597 personas inocentes en esta condición, mientras que en nuestra Región la cifra de imputados que fueron absueltos después de haber estado privados de libertad alcanzó a las 39 personas.

Ese es un factor que, para Geisse, los motiva a seguir buscando la mejor forma de hacer justicia, “pero de calidad” y no aquella que se pretende realizar “en tres minutos”, al referirse a las audiencias en el Juzgado de Garantía.

- ¿Ustedes son defensores de delincuentes, cómo se escucha en tribunales? - Esa es una frase que está acuñada, pero tenemos que decir que somos defensores de de todas las personas, porque lo que estamos haciendo es garantizar un derecho que es de todos, el derecho a defensa y que es propio de un procedimiento penal moderno en el cual están garantizados los derechos de las víctimas y de las personas imputadas. Nuestra principal misión es evitar que un inocente sea condenado en un procedimiento verbal y público.  Es una tarea compleja, pero que en el antiguo proceso casi no tenía espacio para su desarrollo. Hoy en cambio nos corresponde conocer la investigación del Ministerio Público, la versión de la persona imputada, acreditar su inocencia cuando ello es así o bien lograr que haya una condena justa.

¿Cómo ha visto todo este cambio de sistema? - Este es un cambio cultural muy importante, que en la Región lleva poco más de seis años. Es de trascendencia, porque se trató de una modificación de un sistema que imperó durante más de cien años en Chile. Lógicamente que un cambio así demora en entenderse, pero tengo la impresión que existe un sentimiento generalizado que el nuevo procedimiento penal es mejor que el anterior.

Se presume inocente

- ¿Qué sucede con las personas detenidas y que después son absueltas? - La prisión preventiva en el nuevo procedimiento es una medida excepcional y debería ser así, porque atenta contra uno de los derechos más importantes, que es la libertad. Sin embargo, nosotros vivimos la realidad que muchas personas que finalmente son absueltas han tenido que padecer la prisión preventiva. En la Región de Los Lagos, esa situación afectó a 39 personas. A ello se suma que, desde que se inició la reforma, son muchos los imputados que estuvieron privados de libertad y que después fueron absueltos. Esas personas vieron su libertad afectada, sufrieron todas las consecuencias propias de verse expuestos ante la opinión pública, en el trabajo, en el ámbito familiar y en el social. Esa es una situación que nos preocupa.

- ¿Cómo se reparan esas situaciones injustas? - Lamentablemente, en nuestro país situaciones que son muy injusta, desde el punto de vista del imputado, no son suficientemente reparadas o indemnizadas. Pensemos en el caso de Jaime Mayorga, el imputado del supuesto Grooming en Puerto Varas. Esta persona, fue detenida con presencia de cámaras de televisión que fueron informadas previamente, lo que motivó una investigación de la Fiscalía Militar. Producto de esto nos preguntamos, ¿qué habría pasado si no hubiera habido defensa en este caso? ¿No estaría este señor condenado ahora? ¿Qué habría pasado si no hubiera habido una voz que valientemente durante todo ese período, hubiera sostenido la inocencia del imputado? ¿Qué hubiera pasado si alguien no se hubiera preocupado de que se realizaran los peritajes necesarios? Sin embargo, llegamos a un sobreseimiento definitivo confirmado hace pocos días por la Corte de Apelaciones. Pero quien repara esta situación en la cual fue condenado en las portadas de los periódicos, en la televisión y fue invadida su privacidad, con la colaboración de quienes son los agentes de la investigación. Esa pregunta queda abierta.

- ¿Entonces es necesario indagar más en las investigaciones? - No, yo no estoy para dar consejos ni al Ministerio Público, ni a las policías. Nosotros estamos para analizar la situación desde la perspectiva del imputado y en ese sentido nos parece que muchas de las declaraciones de las víctimas y de las primeras diligencias, se deben efectuar bajo cánones más estrictos.

- ¿Cuál es la situación de los adolescentes? - El 80% de los adolescentes que se internan provisoriamente, que es el equivalente de la prisión preventiva, posteriormente o son absueltos o son condenados a penas que no significan el encierro. Allí nos encontramos con una situación, que aún es más grave, dada su edad, porque se trata de personas entre 14 y 18 años no cumplidos. Hablamos de jóvenes donde el tiempo tiene una significación distinta, porque para un adolescente  estar internado provisoriamente es más grave que para un adulto. Entonces yo creo que esto debe ser revisado y aplicar metodologías en materia de investigación que tomen en cuenta y que consideren estas situaciones y no solicitar en forma indiscriminada prisiones preventivas, las que en promedio alcanzan los 60 días para los jóvenes.

- ¿Qué ocurre con la especialización en materia penal adolescente? - La especialización que es necesaria en estas causas, porque además es mandato de la Convención Internacional de los Derechos del Niño y de la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente. La premura en las causas muchas veces impide que nuestros defensores penales juveniles puedan verlas, porque se realizan paralelamente y nosotros no tenemos una dotación de defensores penales juveniles que puedan estar en todas partes. A ello se suma que tampoco existe una especialización de parte de los jueces y fiscales en esta materia. Nosotros hemos establecido dos defensores penales juveniles para Puerto Montt y Puerto Varas. Tal como está el panorama actual, la especialización en materia de Responsabilidad Penal Adolescente es vital, ya que se trata de un grupo etáreo cuya responsabilidad penal en cuanto a su procesamiento y enjuiciamiento tiene un objetivo muy claro que es la reinserción.

Calidad v/s rapidez

- Defensor, ¿Qué es mejor en materia de causas, cantidad o calidad? - Primero veamos la realidad. El año 2007 la Defensoría defendió a 11 mil 80 imputados en la Región de Los Lagos y el 2008 fueron 17 mil 218, lo que significa un aumento de 55,4% en un año. Se trata del mayor incremento de todas las regiones del país. En Puerto Montt, el aumento llegó a casi el 40%, porque se pasó de 3.910 causas en 2007 a 5.203 en 2008. En todo caso existen situaciones más dramáticas, como Osorno, donde aumentó en un 95,9%, de 3.200 causas se pasó a 6.271. Esto es una explosión muy grande de causas, que pone en tensión a todo el sistema. Aunque estamos al límite de lo posible, nuestra preocupación es mantener la calidad de la defensa, al igual que en el caso de los tribunales que también están en el límite.

- ¿Cómo se mantiene el nivel en la calidad de la justicia en este contexto? - ¿Cómo lograr que siga existiendo una justicia justa? No podemos tener una audiencia de tres minutos o de un minuto. Puede ser, pero por algún tema formal, pero si tenemos que ver una carpeta de investigación, entrevistarnos con el imputado y, además, tener una audiencia en la cual se puedan exponer todos los argumentos, no. Esa es la característica del nuevo sistema, el magistrado resuelve en base de lo que dice el Ministerio Público, el querellante y la defensa. Entonces, no podemos constreñirnos a audiencias que no consideren que lo que importa es la calidad de la justicia que se está impartiendo. Es un tema a discutir y es posible que algunas causas terminen en la primera audiencia, pero sin duda lo que no podemos afectar por un exceso de judicialización de causas es la calidad y en la administración de la justicia.

- ¿El defensor necesita más tiempo antes de los controles de detención? - Evidentemente el defensor necesita tiempo para hacerse cargo de los antecedentes de la investigación y poder señalar cuáles son sus argumentos. Creo que eso es lo que tiene que estar garantizado, pero ello muchas veces se ve obstaculizado por la cantidad de audiencias y el número de causas que ingresan. Creo que además del incremento de la judicialización por parte del Ministerio Público, ha existido otro fenómeno. El mismo hecho que la justicia penal nueva sea más eficiente y, sobre todo, pública, como que ha producido inflación de las materias que llegan a este sistema y que muchas veces no tienen las características de penales.

- ¿Se refiere a las causas por Violencia Intrafamiliar? - Cuando existe violencia en la relación intrafamiliar hay casos que tienen que llegar a la justicia penal, pero muchas veces llegan casos que no deberían estar en este sistema, y muchas veces se aplican medidas cautelares de manera indiscriminada. Entonces vemos que se piden medidas cautelares de separación y no aproximación entre la pareja y que, a los cinco días, quedan sin efecto, porque ellos se juntan. Entonces se deben cambiar las condiciones de suspensión condicional y celebrar nuevas audiencias.

- ¿Qué mensaje le entregaría a la comunidad como defensor? - Lentamente la opinión pública está comprendiendo cual es la función de la defensa Penal Pública y de nuestros defensores. Ellos son abogados y su misión es que si tenemos un inocente éste sea declarado como tal y no sea condenado; si estamos ante una persona que va a ser condenada, que se le aplique una pena justa. Estamos concretando un derecho que es el de todos los habitantes de la República, el derecho a que tengan un procedimiento debido y un tratamiento como inocentes hasta que fueran condenados. Esta es nuestra tarea y no es fácil, y estamos intentando defender a la gente con calidad.

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