Sala de Prensa

10/11/2010

¿Inocente o culpable?

La siguiente columna de opinión, publicada ayer -martes 9 de noviembre- en el diario El Centro de Talca, fue escrita por el Defensor Local Jefe de Curicó.

La Reforma Procesal Penal consagró legalmente la presunción de inocencia, que no es más que la condición natural en que toda persona imputada de un delito se ve enfrentada al proceso que se sigue en su contra y emana de la imparcialidad del tribunal que lo juzga.

En efecto, todo ciudadano puede en algún momento verse enfrentado a una persecución penal, debido a que el catálogo de delitos que consagra nuestra legislación es muy amplio y no sólo se encuentra en el Código Penal y sus leyes complementarias, sino que en muchos otros textos.

Para la gente común es imposible conocer todas las conductas  sancionadas penalmente, pero esta falta de conocimiento no deja de dar carácter obligatorio a la norma penal y -lo más importante- su incumplimiento tiene como consecuencia la aplicación de la pena.

Toda persona, entonces, está expuesta a ser involucrada como imputada en un proceso penal. Por eso, las personas gozan de la presunción de inocencia, hasta que una sentencia determine si es culpable o no y, además, puede contar con un abogado. Estos derechos existen para todos, por cuanto nuestro país adscribe a la idea de ser un estado democrático de derechos, donde a cada habitante se le reconoce la dignidad que emana de la naturaleza humana.

Esta condición es reconocida por los órganos que conocen de los procesos y no cabe ninguna duda que cada decisión que se toma en el ámbito jurisdiccional es razonada y pensada por los jueces. Es posible no estar de acuerdo con ellos o pueden equivocarse; sin embargo, existen mecanismos para enmendar los errores, los que tampoco son infalibles, ya que también son procedimientos humanos.

Otro derecho procesal es la publicidad, toda vez que al transformar en orales y públicos los juicios y audiencias de los tribunales hubo un gran avance. Ahora toda la ciudadanía puede auscultar y evaluar el desempeño de jueces, fiscales y defensores, y los medios de comunicación son los llamados a acercar los procesos judiciales a la ciudadanía, basados en la libertad de información.

En mi opinión este derecho (a informar) se ha ejercido de manera poco equitativa, pues si se analizan titulares, crónicas y artículos de algunos medios relacionados con el sector justicia, es frecuente ver que adhieran a una sola de las visiones de los hechos envueltas en un juicio o que sólo reproducen aquello que uno de los intervinientes interesa resaltar, dejando muchas veces postergada la visión de la otra parte, creando incluso algo que yo llamaría ‘convicción de culpabilidad’ en el colectivo social, poniendo apodos, chapas y festinando con las personas.

Amigo lector, frente a esta realidad y existiendo la posibilidad de verse envuelto como imputado en un proceso penal, ¿usted preferiría ser tratado como inocente o como culpable? Si su respuesta es que lo sería como inocente, surge en ese caso una nueva pregunta, ¿sólo por jueces, fiscales y defensores o también por los medios de comunicación?

Por Sergio Aguilera Jara, Defensor Local Jefe de Curicó.

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