Sala de Prensa

07/06/2007

Según defensor regional en Magallanes casi no hay delincuencia juvenil

Dijo que "los jóvenes imputados de delitos son, en su mayoría, por delincuencia circunstancial, ocasional, producto de la ingesta de alcohol". Información publicada en La Prensa Austral

"La Defensoría Penal Pública se encuentra preparada para enfrentar la entrada en vigencia del nuevo sistema de responsabilidad penal adolescente", aseguró el defensor regional Juan Vivar, para lo cual han capacitado a sus abogados y profesionales de otras disciplinas, con el objetivo de entregar una defensa integral. Esto, en atención a que se crea un nuevo sistema donde es necesario que las sanciones que se apliquen a los adolescentes infractores tiendan efectivamente a la reinserción social.

En cifras, Vivar informó que durante el año 2006 prestaron defensa penal pública a 159 menores de entre 16 años y menores de 18 años, quienes en su mayoría fueron imputados por los delitos de lesiones (16%); hurtos y otros delitos contra la propiedad, en especial daños (11,4%), y conducción en estado de ebriedad (9,6%). En todo caso, el defensor valoró que los delitos por ley de drogas no tengan presencia en los jóvenes.

A juicio del defensor regional, "en Magallanes casi no existe delincuencia juvenil", porque los jóvenes imputados de delitos en su mayoría corresponden a delincuencia circunstancial, ocasional, producto de la ingesta de alcohol, "por lo que esperamos que los instrumentos que consigna la nueva ley, puedan ser efectivos a la hora de recuperar y rehabilitar los menores". La nueva Ley 20.084 regulará la responsabilidad penal de los adolescentes mayores de 14 y menores de 18 años que cometan crimen, simple delito o falta y el procedimiento para averiguar y establecer dicha responsabilidad. También contempla la determinación de las sanciones y su forma de ejecución. Según el jefe de la Defensoría Regional, "el nuevo sistema que se ha creado es un desafío para la sociedad en su conjunto, porque se hace responsables a niños de 14 años de infracciones penales. Esto implica que debe haber gente preparada para su atención en todo Chile".

DEFENSORES JUVENILES

La Defensoría tiene la obligación legal de brindar defensa gratuita, "ya que todo adolescente mayor de 14 años de edad será responsable ante la ley, pero también tendrá derechos y es obligación del Estado que ellos se cautelen y que no se vulneren". Tal responsabilidad estará en manos del jefe de estudios de la Defensoría, Juan Carlos Rebolledo, y la defensora local jefe, Gustava Aguilar, quienes junto a la encargada de la Unidad de Apoyo a la Gestión de Defensa, la asistente social Paula García, serán los encargados de defender los derechos de los adolescentes en cada uno de los actos de persecución penal que se lleven en su contra en Magallanes. "Esto cobra especial relevancia si se considera que entre las novedades de esta ley está el hecho de que los menores sólo podrán ser interrogados estando presente el defensor, por lo que se requiere la coordinación con los diferentes organismos a objeto de informar a los defensores cuando sea detenido un menor y para que éste acuda al cuartel policial respectivo, lo que difiere de lo que acontece con los adultos donde en la mayoría de los casos no son avisados de que hay detenidos y suelen entrevistarse con los imputados sólo minutos antes de comenzar la audiencia", advirtió Vivar.

Tal cual como sucede actualmente, el tratamiento mediático de los menores sigue quedando restringido, por cuanto se debe proteger la identidad del menor no pudiéndose a través de los medios mostrar el rostro ni dar la identidad, según lo consagra la propia Ley de Prensa en su artículo 33, la Convención de Derechos Humanos de la Onu, la reglas de Beiging y los principios éticos para informar respecto a los menores de la Unicef, entre otros reglamentos. "La idea es evitar estigmatizar a los menores para que se afecte su proceso de rehabilitación y reinserción social que, creo, es lo que queremos en el fondo todos en nuestra sociedad", comentó el defensor.

Lo más importante del nuevo sistema es que efectivamente se oriente a la reinserción social. Y se recalca la obligación del Estado de Chile para que las sanciones sean justas y que no se aparten del espíritu de la legislación, recalcando que las sanciones de internación en los regímenes cerrados o semi cerrados deben ser el último recurso.

Vivar coincidió en que esta ley no busca bajar los índices de delincuencia juvenil: "tal vez con el tiempo pudiera producirse un descenso producto de las sanciones y las medidas de rehabilitación; sin embargo por tratarse de un problema multicausal y transversal, para bajar los índices de delincuencia juvenil se requiere medidas sociales y legales".

IMPORTANCIA DE LOS PADRES

Los padres, advierte, jugarán un rol fundamental por cuanto deben hacerse responsables de los menores cuando éstos sean imputados. Los tribunales les notifican la primera audiencia en el caso de una acusación por falta. Cuando el adolescente es inimputable, los padres y tutores que lo tengan a su cuidado, reciben al menor infractor de parte de la autoridad. "Es importante recordar que la responsabilidad penal de los niños menores de 14 años no es traspasable a sus padres, pero sí tienen responsabilidad civil sobre ellos. Es decir, que si una víctima interpone una demanda en contra del padre o tutor del niño autor de algún daño, robo, etc., eventualmente los padres deberán los padres deberán pagar un monto de dinero para reparar el daño causado por el joven".

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