Sala de Prensa

08/02/2012

¿Verano ilegal?

La siguiente columna de opinión fue escrita por el Defensor Regional del Maule, José Luis Craig Meneses.

“Las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos”.

Quise empezar la columna de esta semana con el primer inciso de nuestra Carta Fundamental. Frase sencilla, pero muy relevante a la hora de extraer consecuencias de ella.  Por algo el constituyente empezó tan importante texto con ella.   Tan importante es, que marca con particular claridad el estado natural de las personas: son libres. Es por ello que cada vez que el Estado necesita restringir tal libertad, debe hacerlo de manera temporal, excepcional y legal. Es decir, nada justifica que el Estado concertadamente y de manera irreflexiva conculque de alguna forma nuestra libertad.

Es esto lo que a veces -y particularmente en verano- olvidamos, ya que cada vez son más frecuentes, y por ello supuestamente validados, los famosos planes “Estrella”, “Verano Seguro”, “Arenas Doradas” y un largo etcétera, que llevan adelante nuestras policías en toda la longitud de nuestro litoral.

Tales planes, sin temor a equivocarme, están al filo de la legalidad, toda vez que parten del supuesto equivocado, cual es que con el afán de tener unas vacaciones más seguras, las policías pueden restringir la libertad tanto de lugareños como de veraneantes sin ningún control, olvidando lo que en toda temporada y clima es exigible, cual es la legalidad de cualquier restricción de nuestra libertad.

Es que por mucho que el clima lo amerite, no se puede siquiera pedir la cédula de identidad en la calle a persona alguna (menos simplemente detenerla), sin tener al menos indicios de que tal persona cometió o va a cometer un ilícito o puede dar datos acerca de la comisión de uno.

Lo anterior no se parece en nada a lo que vemos que sucede, sobre todo por las noches en las ciudades balneario del país, ya que se procede a controlar, sin cortapisa alguna, a grupos masivos de gente, sin siquiera haber existido una llamada de auxilio de los vecinos. Y, lo que es más grave, de acuerdo con un plan, ideado y organizado de antemano por los altos mandos de las policías.

Me podrán decir que “el fin justifica los medios”, pero yo retrucaría con otra frase célebre: “los pueblos que entregan su libertad con el fin de conseguir más seguridad, lo más probable es que pierdan las dos”.

Por José Luis Craig Meneses, Defensor Regional del Maule.

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