Sala de Prensa

22/06/2012

Ante unas 30 personas

Jefe de Estudios de O’Higgins realiza diálogo penitenciario en cárcel de Rancagua

En la actividad se les informó también sobre los requisitos y exclusiones para aplicar la Ley General de Indulto.

Conocer de primera fuente la evaluación que hacen los usuarios de la Defensoría Regional de O’Higgins, acerca del trabajo que la institución realiza en la zona, es una de las inquietudes de los directivos regionales. Por ello, semestralmente se organizan diálogos participativos al interior de los recintos penales, y en el cual –de manera distendida– los directivos conversan con los internos sobre algún tema jurídico para luego consultar su evaluación respecto al servicio que le fue brindado.

La actividad, se realizó en una de las salas de clases del módulo de imputados del Complejo Penitenciario de Rancagua y en él se dieron cita cerca de 30 personas a quienes se les explicaron los alcances de la Ley General de Indulto, esto porque a juicio del jefe de Estudios regional, Leonardo Díaz, “el desconocimiento de los requisitos y exclusiones que tiene este cuerpo legal era  total, pues a la fecha, la única información al respecto que tenían los internos era la obtenida a través de los medios de prensa. EL problema eran las altas expectativas que esto generó, por lo que era de sumo necesario contextualizar sus alcances”.

Una vez realizada la charla se dio paso a la evaluación que realizan los internos del trabajo de la Defensoría Penal en sus causas, mostrándose en general conformes con un servicio profesionalizado que da respuestas a sus inquietudes y acompañamiento en el proceso.

No obstante de entre el grupo de imputados también surgieron críticas respecto a cantidad de visitas mensuales que reciben de sus defensores (encontraban escasas las visitas cada 15 días) a lo que Leonardo Díaz respondió que si bien se entiende el grado de ansiedad y angustia que provoca la situación de privación de libertad, también es cierto que los procesos investigativos de las policías y la dinámica propia de la justicia penal no permite obtener información relevante todas las semanas, por lo que es suficiente la periodicidad de las visitas, sin embargo, dijo estar claro que el defensor tiene el deber ético  de informar a su representado los hitos importantes de su causa lo antes posible.

La actividad terminó con la atención particular de algunos internos que tenían algunas dudas respectos a la posibilidad de unificar sus penas u optar a un beneficio, respuestas que fueron respondidas por el Defensor Regional, Alberto Ortega y el jefe de Estudios de la Región de O’Higgins.

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