Sala de Prensa

28/12/2012

Acceso de extranjeros a la justicia

La siguiente columna del Defensor Nacional, Georgy Schubert Studer, fue publicada por el diario La Tercera el pasado lunes 24 de diciembre.

Enfrentar el sistema de justicia criminal siempre será algo difícil, pero no tiene por qué ser una pesadilla ni para usted ni para un migrante. El derecho a una defensa penal de calidad resulta fundamental.

IMAGINESE QUE usted ha causado un grave accidente del que han resultado personas lesionadas o incluso fallecidas. Enfrentar a la justicia penal en esas adversas condiciones puede resultar una pesadilla, más aún si lo que está en juego es una posible privación de libertad. Cargos y pruebas en su contra; testigos, imputaciones, leyes y alegatos en una jerga que escasamente logra comprender. Pues bien, si para usted y cualquier ciudadano esto puede significar un verdadero calvario, imaginemos cómo llega a vivir esta situación un extranjero, lejos de su país y de sus redes de apoyo. Qué decir si, a esto sumamos, no comprende el idioma en el que está siendo acusado.

Cuando en la Defensoría Penal Pública hablamos de grupos vulnerables, nos referimos precisamente a este tipo de personas que se ven en absoluta desventaja frente al sistema penal. De muchas maneras, la justicia los castiga con más dureza. Para hacer justicia, entonces, se debe procurar que exista igualdad de condiciones para todos, y esto es a lo que aspira nuestro servicio, al insistir en el cumplimiento de los tratados e instrumentos internacionales suscritos por Chile en materia de derechos humanos, lo que por supuesto involucra de forma especial a personas que vienen de otros países.

¿Qué es lo mínimo que podemos pedir para los extranjeros y migrantes imputados de un delito? Junto con todos los derechos que les asisten como a cualquier ciudadano chileno, se debe exigir que comprendan de qué se les acusa y cuál es el proceso que enfrentarán, así como que se les reconozca el beneficio que tienen a que se les entregue asistencia consular. Es decir, pueden exigir esfuerzos en materia de traducciones e intérpretes o posibilitar el contactarse con representantes oficiales de su país natal en Chile.

En este marco, el derecho a una defensa penal de calidad resulta fundamental, y de ahí que la Defensoría Penal Pública sume esfuerzos permanentes en capacitar a sus profesionales sobre los elementos jurídicos y las particularidades de vida de los imputados extranjeros, generando una línea de defensa especializada en este sentido.

En un desafío conjunto con el Ministerio Público, conformamos hace unos meses la Mesa Interinstitucional de Acceso a la Justicia de Extranjeros y Migrantes, que convocó a diversas instituciones relacionadas, entre éstas, a los Ministerios de Justicia y de Relaciones Exteriores, Carabineros de Chile, Policía de Investigaciones y el Instituto Nacional de Derechos Humanos. Pronto este trabajo se materializará en herramientas y productos concretos.

En el contexto del Día Internacional del Migrante, nos sentimos optimistas por estos avances iniciales. Los actores del sistema de justicia, especialmente los defensores públicos, comenzamos a comprender cada vez mejor la especial situación de aquellos que a veces no tienen con quién dejar a sus hijos en caso de ir a la cárcel o que no saben qué pasará con éstos si son afectados por un decreto de expulsión.

Enfrentar el sistema de justicia criminal siempre será algo difícil, pero no tiene por qué ser una pesadilla ni para usted ni para un migrante. Para evitar lo anterior el derecho a una defensa penal de calidad resulta fundamental.

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