Sala de Prensa

31/12/2013

Ante la Segunda Sala de la Corte Suprema

Defensoría alegó recurso de revisión para liberar a inocente preso en Copiapó

El jefe de Estudios de la Defensoría Regional de Atacama, Renato González, explicó a los magistrados los errores de investigación que llevaron a prisión a Julio Robles Vergara.

El 14 de enero próximo se conocerá el fallo de los ministros de la Sala Penal de la Corte Suprema, quienes esta mañana escucharon los alegatos de un recurso de revisión presentado por el jefe de Estudios de la Defensoría Regional de Atacama, Renato González, en favor de Julio César Robles Vergara (35), un trabajador que el año pasado fue condenado por el Tribunal Oral en lo Penal de Copiapó, imputado por un robo con violencia ocurrido en esa ciudad el 4 de agosto de 2010. 

Durante su exposición, González expuso ante el alto tribunal -integrado por los ministros Hugo Dolmestch (presidente), Lamberto Cisternas y Juan Escobar, junto a los abogados integrantes Ricardo Peralta y Luis Bates- los errores de investigación que condujeron a este inocente a prisión, básicamente ocurridos en el procedimiento de reconocimiento que realizó la policía en su momento. 

También explicó que posteriormente, la propia víctima del asalto -Hugo Henríquez- reconociera al verdadero autor del robo al interior de un supermercado, a partir de lo cual reconoció públicamente su error e incluso visitó a Robles en la cárcel de Copiapó, para disculparse con él. 

“Jamás había presentado un recurso de revisión. Este es el primero, por el respeto a su carácter extraordinario y por el convencimiento pleno sobre la inocencia de don Julio, quien al momento de los hechos llevaba nueve años trabajando en una empresa contratista de Codelco en El Salvador, no tenía antecedentes penales, ganaba entre 600 y 700 mil pesos y tenía 32 años, pese a que las víctimas dijeron que el autor tenía entre 20 y 25, aproximadamente, cosa que a nadie le importó”, dijo. 

González comparó los procedimientos que terminaron afectando a Robles con los preceptos que contiene el protocolo que el Ministerio Público y las policías aprobaron el año pasado para regular precisamente los reconocimientos de sospechosos, diligencia que en este caso “no cumplió ningún estándar de calidad”.

Llamó la atención el hecho de que ningún representante de la Fiscalía alegara como contraparte del recurso, hecho que fue bien valorado por el jefe de Estudios de la DPP en Atacama: “Habría que consultar a la Fiscalía por qué no estuvo presente, pero imagino que la fuerza de este caso es relevante: Julio Robles es inocente y si bien la Fiscalía objetó la causal, en estricto rigor tampoco ha hecho mayor oposición de esta discusión”.

LOS HECHOS

Según la investigación y los hechos posteriormente acreditados en el juicio oral, durante la tarde del 4 de agosto de 2010 un sujeto asaltó un establecimiento comercial de la Población Juan Pablo II, en Copiapó.

En las primeras indagaciones realizadas por Carabineros -consistentes en un reconocimiento fotográfico- se habría establecido que el autor era Julio Robles, quien justo dos horas antes de los hechos había llegado a Copiapó desde el mineral de El Salvador, tras concluir un turno de faenas nocturnas de cinco días.  

El reconocimiento hecho por las víctimas del asalto resultó fundamental para que el Tribunal Oral en Lo Penal de Copiapó condenara a Robles el 12 de junio de 2012, momento desde el cual cumple su sentencia en el penal de Copiapó, pese a que desde el inicio de la investigación alegó su inocencia.

RETRACTACIÓN DE LA VÍCTIMA

Un par de meses después, sin embargo, la víctima del asalto -Hugo Henríquez- vio al verdadero asaltante en un supermercado de Copiapó, dándose cuenta de su error, a partir de lo cual concurrió a la Fiscalía y a distintos medios de comunicación para clamar por la reparación del error que mantiene a este inocente tras las rejas.

Henríquez visitó incluso a Robles en la cárcel, donde se mostró arrepentido del error que cometió, todo lo cual no bastó para revertir esta injusticia, motivando así la interposición de este recurso de revisión de la Defensoría Penal Pública. 

Al término de la audiencia de esta mañana, la hermana de Julio, Cecilia Robles, se mostró emocionada y muy esperanzada en que los ministros de la sala penal acojan los argumentos para lograr la liberación de este inocente: “El proceso ha sido súper largo y con harto sufrimiento, porque hay que tener la paciencia para saber esperar y llegar a un final victorioso. Hay que ser perseverante para que se demuestre la inocencia de Julio. Él ahora ha visto una luz y está muy esperanzado y siente paz en el corazón”, aseguró.

 

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