Sala de Prensa

02/06/2014

Por tribunal de Osorno

Colectivero acusado de secuestro y abuso sexual anuncia querella tras ser absuelto (*)

Marcelo Avilés (40 años) fue detenido el 12 de diciembre de 2012, tras ser sindicado por una pasajera como el autor de dos delitos. Ahora él busca justicia, luego de estar privado de libertad en la cárcel y con arraigo en su domicilio.

(*) La siguiente información fue publicada por el Diario Austral de Osorno.

"Sinceramente lloré cuando estuve en la cárcel, ya que estaba injustamente detenido por algo que no había hecho. Además, no pude celebrar como todos los años el cumpleaños de mi madre y el mío. Pero al final la justicia se pronunció y ratificó que soy inocente del secuestro y abuso sexual".

El testimonio corresponde a Marcelo Avilés, quien el 12 de diciembre del 2012 fue detenido por la PDI, tras ser sindicado como el presunto autor del secuestro, abuso sexual y robo de dinero de una pasajera ocurrido el 7 de diciembre de aquel año, y a quien supuestamente había abandonado posteriormente en la Ruta 5, al sur de Osorno.

Quien aparecía como víctima en aquel entonces era una mujer de 38 años, que lo identificó por medio de un retrato hablado -confeccionado por la PDI- como el responsable de los hechos.

Sin embargo, el pasado lunes, tras finalizar el juicio oral que comenzó el jueves 22, los jueces -en forma unánime- determinaron absolverlo de los delitos de secuestro y abuso sexual, por los cuales lo había llevado la Fiscalía hasta el estrado.

"Yo siempre le dije al funcionario de la PDI que me interrogó que era inocente. Pero él incluso llegó a decirme que dijera que yo había sido y que iba a estar dos a tres meses en prisión preventiva y luego el caso se iba a olvidar. Pero no lo hice", expresa con seguridad Avilés, respecto del inicio de la investigación.

"Quién sabe si con otras personas con menos educación lo pueden hacer, pero en mi caso yo sabía que había un error", agregó el chofer, quien en todo momento recibió el respaldo de sus colegas colectiveros, los cuales confiaban en su inocencia.

Tanto fue el respaldo, que los conductores lo eligieron este año presidente del Sindicato de Trabajadores Independientes de Taxis Colectivos de Osorno.

Avilés dice que se sorprendió cuando fue formalizado y el fiscal enumeraba en la audiencia los delitos de robo, violación y secuestro, que lo llevaron a estar en prisión preventiva desde el día de su detención hasta el 30 de enero del 2013. Posteriormente dejó la cárcel, pero debió trasladarse a su hogar, donde durante 10 meses (hasta octubre de 2013) cumplió arresto domiciliario total y parcial.

"Mientras estuve en prisión y pasaban los días, esperaba que llegaran a decirme 'Marcelo, fue un error', pero nada. Pasaron los días y llegamos a juicio oral. Ahí, incluso, la víctima me identificó como el autor del ataque, cuando pasó a entregar su declaración ante los tres jueces", recordó el empresario de la locomoción colectiva.

Marcelo Avilés, al recordar en su oficina los momentos vividos por un error, del cual responsabiliza a la policía y a la Fiscalía, anuncia que se hará asesorar por un abogado a fin de seguir acciones legales contra quienes resulten responsables de los hechos que lo llevaron a ser imputado por delitos que, recalca, no cometió.

"Los jueces se pronunciaron y por unanimidad ratificaron mi inocencia. Ahora buscaré la forma de presentar una querella contra aquellas personas que me acusaron injustamente", manifestó el dirigente del transporte.

DEFENSORA
"Siempre, y desde un comienzo, aseguramos que Marcelo no era el responsable del supuesto delito de secuestro con violación como formalizó el Ministerio Público, y que al final llegó a juicio oral por abuso sexual (acusado por Fiscalía), además de secuestro, que fue el delito que buscó acreditar la parte querellante. Estamos conformes con el trabajo realizado, ya que acreditamos la inocencia de una persona", expresó la abogada Soledad Llorente.

La defensa consiguió acreditar que el día y la hora en que ocurrieron los hechos denunciados por la mujer, Marcelo Avilés estaba en el sindicato junto a sus colegas, quienes nunca lo dejaron solo, recalcó la abogada.

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