Sala de Prensa

25/07/2008

Defensoría participa en inédita Plaza de Justicia al interior del penal de Alto Hospicio

Decenas de internos fueron atendidos por profesionales de servicios públicos y hasta pudieron obtener carné de identidad.

Una gran satisfacción por los resultados de la Plaza de Justicia cumplida al interior del Penal de Alto Hospicio formularon los representantes de los servicios públicos, y más aún los detenidos y reos que fueron atendidos en la actividad. Este quehacer comenzó poco después de las 10 de la mañana, culminando más allá de las 12 horas, especialmente por el alto interés de los internos por consultar con los abogados y otros profesionales presentes en una tarea colectiva coordinada por la Defensoría Penal Pública, región de Tarapacá.

Los 120 internos que llegaron hasta el gimnasio techado del complejo penitenciario fueron escogidos desde los diferentes pabellones  por tener la mejor conducta, lo que les permitió tener más de dos horas para acudir libremente a los siete centros de atención que montaron las reparticiones fiscales.

Tal posibilidad fue calificada como "una completa sorpresa" por muchos de los asistentes, quienes buscaron principalmente a los abogados que formaban parte de los equipos funcionarios. También destacaron la posibilidad de conseguir el carné de identidad a cargo del Registro Civil e identificaciones, en un trámite que les es habitualmente dificultoso por su privación de libertad.

La atención de los servicios fue tan exitosa que desde el primer momento se formaron tupidos grupos en espera de turno para la atención de cada caso particular. El interés obligó a extender el servicio hasta casi las 12:30 horas, puesto que seguían las filas de usuarios en espera de respuesta a sus consultas.

El módulo de la Defensoría Penal Pública fue el más concurrido, puesto que desde el primer momento se formó una larga fila a la espera de la atención con el defensor público Héctor Alvarez Fortte, quien no se movió de su escritorio durante las dos horas que duró esa parte de la actividad. La demanda era tanta que la Facilitadora Intercultural, Inés Flores y los funcionarios Paola Pérez y Hugo Bustos debieron habilitar otros sectores para orientar a los internos respecto de sus consultas. Varios de ellos utilizaron el tiempo para escribir cartas dirigidas a los servicios estatales, pidiendo a la Defensoría que actuara como entidad conductora de tales inquietudes.

Inédita

"Esta es una actividad inédita en la región. Estamos muy satisfechos  por el servicio prestado, sabíamos que habían muchas consultas e inquietudes por la evidente condición de imposibilidad de acceso directo a nuestros servicios. Es por ello que nuestro balance es muy positivo: se dieron soluciones concretas a las consultas y se entregaron servicios de gran demanda en la población penal. Yo misma me entrevisté con muchos internos analizando caso a caso, situaciones que atenderemos  conforme nuestras atribuciones", explicó la seremi de Justicia (S), Ana María Vargas, autoridad que encabezó el operativo.

Por su parte, el defensor penal pública Héctor Alvarez se mostró complacido por "haber podido entregar orientación sobre puntos muy personales que planteaban los internos. Ellos se mostraron muy animados por esta posibilidad de una atención tan amplia de todos los servicios, como también por disponer de los profesionales de la Defensoría para atender sus consultas específicas", indicó.

En la Plaza de Justicia participaron también la Defensoría Penal Pública, el Servicio Nacional de Menores, el Registro Civil e Identificaciones, Gendarmería, la Corporación de Asistencia Judicial y el Servicio Médico Legal. También colaboró con la actividad el Área Social de la empresa SIGES, concesionaria del centro de cumplimiento penitenciario.

La Plaza de Justicia es una actividad mensual diseñada por los servicios dependientes y relacionados con el Ministerio de Justicia, la cual consiste en llegar con las oficinas de atención a los sitios comunitarios de mayor aislamiento o concentración poblacional. Para esta oportunidad se eligió al penal de Alto Hospicio por la posibilidad de atender a personas que no tienen oportunidades regulares de acceso a los servicios públicos del Estado.

Para la oportunidad Gendarmería de Chile entregó su apoyo y las facilidades para permitir que un número significativo de los internos en el penal pudieran llegar hasta el gimnasio y participar con soltura de esta atención colectiva, en una actividad coordinada por la Defensoría Penal Pública, apoyada por profesionales de la SEREMI de Justicia que a través de los micrófonos explicaron a los presentes el sentido y ordenamiento de esta atención pública. A ellos se les sumó el Área Social de SIGES, la empresa concesionaria, que facilitó equipamiento de amplificación, proyección audiovisual y mobiliario para la comodidad en la atención, mientras que SENAME facilitó su vehículo institucional para el traslado de la prensa regional.

Respecto a la atención brindada, la seremi de Justicia (s) recalcó finalmente que "el único derecho que pierden los internos  es su derecho a la libertad. Se trata de población vulnerable, que requiere de una serie de servicios y sobre todo información  respecto de sus posibilidades y de la oferta pública disponible para ellos".

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