Sala de Prensa

12/04/2021

Tras duro informe del juez de garantía Cristian Sánchez

Jefe regional de Estudios constató situación del módulo 88 en la cárcel Santiago Uno

El jefe de Estudios de la Defensoría Metropolitana Sur, Mario Palma, se entrevistó con S.P.M. (41), uno de los internos que se encuentran en la celda 1 del módulo 88 de la cárcel Santiago Uno, quien fue fue consignado por el magistrado como una de las personas afectadas por deplorables condiciones sanitarias desde hace varios meses.

Por Gustavo López Valeria
Defensoría Regional Metropolitana Sur

En conocimiento de la situación denunciada por el juez, el jefe de Estudios de la Defensoría Regional Metropolitana Sur (DRMS) Mario Palma, llegó hasta la cárcel Santiago Uno, donde se entrevistó con S.P.M., el único de los seis internos que se encuentran en esa celda que mantiene una causa representada por esta sede institucional, quien reiteró los conceptos del informe respecto de falta de agua potable y luz eléctrica, inexistencia de lavamanos o ducha, con el suelo cubierto de colchonetas que sirven como camas, además de un inodoro obstruido y emanación de olor por alimentos descompuestos.

Luego de la entrevista, Palma recordó que en el caso de S.P.M. la defensora pública de esa causa, Ana María Millón, solicitó una audiencia de cautela de garantías en las semanas previas, tras conocer el testimonio de familiares del imputado sobre la situación sanitaria en que se encontraba.

El informe del juez Sánchez se produjo luego de una visita suya al penal, en compañía del defensor local jefe de Santiago, Víctor Providel, contexto en que se evidenciaron malas condiciones como la falta de espacio, de agua potable y de baños mínimamente adecuados.

La audiencia de cautela de garantías está fijada para el próximo jueves 15 de abril, cuando la defensa pública solicitará el traslado del imputado a un lugar que entregue condiciones de seguridad y salubridad adecuadas para su representado.

DURO INFORME
En su informe, el juez de garantía indicó que algunas de las seis personas que permanecen en la celda 1 del módulo 88 afirmaron no haber salido al patio desde hace varios meses, además de presentar casos de enfermedades cutáneas o imposibilidad de movilizarse por una discapacidad física.

El magistrado hizo especial mención a las condiciones de salubridad de los internos, por la falta de agua potable directa, la situación del baño tapado -los internos hacían sus necesidades en bolsas durante la noche- y la existencia de alimentos en mal estado y en proceso de putrefacción.

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