Sala de Prensa

15/06/2021

Entrará en vigencia el próximo 1° de julio

Defensoría de O'Higgins presentó nuevo modelo de defensa penitenciaria a autoridades de Gendarmería

Como parte de este nuevo piloto, la triada directiva regional explicó que este nuevo modelo incluye la universalidad en la atención, la vigilancia de las condiciones carcelarias y el resguardo ante la violencia institucional.

Por Andrea Contreras Márquez,
Defensoría Regional de O'Higgins.

En 2011 la Defensoría Penal Pública incorporó a sus servicios la defensa penitenciaria, modelo en que abogados y asistentes sociales especializados atienden los requerimientos de las personas condenadas privadas de libertad que solicitan su representación ante solicitudes como beneficios intrapenitenciarios, unificación de causas y traslados, entre otros.

No obstante, a contar del 1° de julio próximo  entrará en vigencia un nuevo modelo, con el que esencialmente se asegurará la atención de este equipo a toda persona recluida en una unidad penal, aunque ahora se incluirá el monitoreo de las condiciones carcelarias y el resguardo de internos e internas ante hechos de violencia institucional.

En la región de O’Higgins el piloto se desarrollará en el complejo penitenciario de Rancagua, por lo que el Defensor Regional, Claudio Aspe; el jefe de la unidad regional de Estudios de la Defensoría, Mario Quezada, y el director administrativo regional, Víctor Varas, se trasladaron a esa unidad penal, para presentar el modelo a las autoridades regionales de Gendarmería, incluido el alcaide del recinto penal y sus oficiales colaboradores.

ACOMPAÑAMIENTO PERMANENTE
Según explicó el jefe de Estudios, la primera atención que impartirá el equipo de defensa penitenciaria ocurrirá antes de que se cumplan diez días desde el ingreso de un nuevo condenado, instancia en la que los profesionales de la institución sostendrán una reunión y le explicarán sus derechos y deberes dentro del penal, las posibilidades de beneficios y los servicios que les puede prestar la defensa pública. A partir de ahí habrá un acompañamiento permanente, cuya periodicidad dependerá de los años de condena de cada persona.

El Defensor Regional señaló que otra de las labores que realizará el equipo será apoyar la gestión de actividades de reinserción social de la población penal, además de colaborar con Gendarmería en la gestión de atenciones de salud externas, por ejemplo.

Para la directora regional de Gendarmería, coronel Helen Leal, este nuevo modelo implicará una mayor coordinación entre ambas instituciones, trabajo que sin duda supondrá una mejor atención para usuarios y usuarias. Por lo mismo, puso a disposición los equipos técnicos del penal rancagüino para iniciar las reuniones previas.

Este modelo espera lograr una total cobertura de la población penal del país, aunque inicialmente el piloto se llevará a cabo sólo en seis regiones: Tarapacá, O’Higgins, Maule, Ñuble, Aysén y en la cárcel de mujeres de San Miguel, en la Región Metropolitana.

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