Sala de Prensa

26/10/2023

Junto a otras cinco sedes regionales de la institución

Defensoría del Biobío inició piloto de defensa de género

Tres son las defensoras públicas de la región que darán forma a esta nueva línea de defensa especializada en materia de género y diversidad sexual en el Biobío. Tendrán asignación prioritaria en causas de drogas y violencia intrafamiliar (VIF).

Por Victoria Haquin V.;
Defensoría Regional del Biobío.

Esta semana se dio inicio oficial al piloto de género en la Defensoría Regional del Biobío, lo que implica la asignación de causas de mujeres y personas LBGTIQA+ a tres defensoras públicas que ejercerán todos los derechos específicos que les corresponden a estos grupos, tanto en el ordenamiento jurídico nacional como internacional.

Las abogadas Monserrat Varela Mutizabal, Nelly Argel Figueroa y Catalina Poblete Perez serán las encargadas de tramitar estas causas, que comprenden a personas que se encuentren en calidad de imputadas en una o más causas, ya sea en prisión preventiva u otra medida cautelar y por delitos de tráfico de drogas o violencia intrafamiliar, sin importar su edad o nacionalidad, para luego instar a la universalidad en la atención de todos estos casos en sus respectivas zonas de defensa.

El Defensor Regional, Osvaldo Pizarro, explicó que “este plan viene a afianzar y dar una estructura a la defensa con perspectiva de género que la Defensoria Regional del Biobío viene desarrollando hace años, pero que tuvo su principal punto de visibilidad con el caso de Lorenza Cayuhan y los fallos obtenidos recientemente en favor de mujeres que fueron inicialmente imputadas, pero que finalmente fueron absueltas o sobreseídas tras exponer -sus defensoras y defensores públicos- que  vivieron años de brutal, permanente y continua violencia intrafamiliar”, señaló.

La iniciativa se suma a las otras líneas de defensa especializada de la Defensoría Penal Pública: para personas adolescentes, migrantes, de pueblos originarios, mujeres y penalmente condenadas, respectivamente.

UNA DEFENSA NECESARIA
Monserrat Varela se refirió al desafío de sumarse al plan piloto y destacó la relevancia de que “las instituciones de Estado recojan las obligaciones que imponen los tratados internacionales, en el sentido de dar protección a las mujeres, prevenir y  erradicar toda forma de violencia o discriminación y, en ese sentido, creo que  tratándose de mujeres perseguidas penalmente, muy especialmente aquellas privadas de libertad, hay un nivel de vulnerabilidad del que tenemos que hacernos cargo como funcionarios públicos y como Defensoría”, sostuvo.

Este nuevo modelo de defensa especializada surgió desde la “Mesa de género” instaurada a nivel nacional por la institución, que buscó estructurar un mecanismo para otorgar una defensa adecuada y de calidad a estos grupos vulnerables, no sólo desde la base del derecho, sino además teniendo en consideración su especial condición de desigualdad, prejuicios y discriminación que viven a diario.

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