17/09/2009
Estuvieron 23 meses en prisión preventiva y fueron absueltos en el juicio oral
Dos jóvenes fueron acusados de robo con violencia y robo con intimidación, pero el tribunal desestimó las imputaciones. Otros dos imputados también quedaron libres.
Luego de permanecer 23 meses privados de libertad en la cárcel de Huachalalume, Alan Rojas y Pablo Pizarro recuperaron su libertad, tras ser absueltos por el Tribunal Oral de esta ciudad de dos hechos distintos que configuraban los delitos de robo con violencia y robo con intimidación y por los que arriesgaban una condena de 10 años y un día de presidio.
Luego de dos días de juicio oral, los magistrados Juan Carlos Espinosa, Jorge Pizarro y Caroline Turner resolvieron absolver de toda acusación penal a los jóvenes Raúl Araya (20) -quien estuvo tres meses privado de libertad-, M.A. (16); Alan Rojas (18) y Pablo Pizarro (20), por no acreditarse la existencia de un delito y no confirmarse la participación de los acusados en el otro.
La acusación del Ministerio Público estuvo fundamentada por dos situaciones ocurridas en la madrugada del 20 de octubre del 2007 en el sector Sindempart de Coquimbo. En el primero, tipificado como robo con violencia, cerca de las 3 de la madrugada, los acusados Alan Rojas y Pablo Pizarro supuestamente intimidaron con un arma de fuego a Jorge Marín, apropiándose de una cadena de plata, un juego de llaves, una chaqueta impermeable, 3 mil 700 pesos en efectivo y una cajetilla de cigarros.
Sin embargo, si bien en el juicio oral se acreditó el ilícito, no se corroboró la participación de los imputados, ya que la víctima en su declaración no pudo aseverar que los acusados fueron las personas que lo asaltaron, agregando que horas después del hecho Carabineros lo fue a buscar a su domicilio, para exhibirle a dos detenidos que él creyó eran sus victimarios. Al respecto, los jueces determinaron que existió un alto grado de inducción de los funcionarios policiales.
En el segundo hecho, configurado como robo con intimidación, alrededor de las 4 de la madrugada los cuatro acusados también habrían intimidado con un arma de fuego a Jaime González y Camila Pastén, extrayendo de entre sus ropas un reloj de pulsera, una billetera con documentación personal, un chaleco de lana y 10 mil pesos.
Sobre esto los jueces resolvieron que no se acreditó la existencia del delito y, por consiguiente, tampoco la participación de los acusados, por falta de credibilidad en la versión de la víctima, ya que en su relato hubo insuficiencias y vaguedades, pues en estrado dijo que no recordaba mucho sobre los hechos, situación que le fue reprochada por el tribunal en su calidad de funcionario de Carabineros.
Mientras el Ministerio Público estuvo representado por el fiscal Claudio Correa, Pablo Pizarro lo fue por el abogado particular José Luis Medina, Alan Rojas por la defensora penal pública María Anabel Campo, Raúl Araya por la defensora pública Fabiola García y el menor M.A.por Paula Pérez, respectivamente.
