Sala de Prensa

16/11/2011

Adolescentes, drogas y delito

La siguiente columna de opinión, publicada hoy en el diario El Mercurio de Antofagasta, fue escrita por el Defensor Local Jefe de esa ciudad, José Mario Fuentealba.

El problema de la rehabilitación de jóvenes dependientes del consumo de drogas es, ciertamente, un tema social difícil de abordar, más aún si estamos en presencia de adolescentes infractores de ley penal que no cuentan con apoyo familiar, que son violentados física y sicológicamente y provenientes de familias carentes de recursos económicos.  

Sumado a ello, se debe tener presente que un tratamiento antidrogas supone una permanencia en el tiempo, la ayuda de un equipo de profesionales y, en definitiva, hace necesario en muchos casos la internación en un centro especializado. En síntesis, el camino a la recuperación del consumo de drogas es un proceso de largo aliento, que debe considerar el elemento “recaída” como parte del tratamiento.

Este tema cobra vigencia con la implementación de la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (LRPA),  por cuanto se ha establecido como sanción  accesoria a la comisión de un ilícito la de someter al joven a un tratamiento de rehabilitación por adicción a las drogas. 

Además, en la ejecución de un programa de intervención individual que llevan aparejado algunas penas de la citada ley, se contempla la posibilidad de derivaciones a centros antidrogas, en la medida que en esa etapa de cumplimiento de pena se detecte una adicción.

Es fundamental en cualquier intervención que el adolescente manifieste de alguna forma motivación de cambio y adhiera a un tratamiento, lo cual supone necesariamente una voluntariedad en orden a generar rehabilitación.

Se suma a estas alternativas de rehabilitación el establecimiento, en la Región Metropolitana, de los tribunales de tratamiento de drogas para adolescentes, que se traducen en someter al infractor de ley a un tratamiento como condición de la llamada suspensión condicional del procedimiento. Si el adolescente cumple y se rehabilita, no existirá condena.

En suma, la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente ha abierto un abanico de posibilidades de rehabilitación, atacando uno de los elementos que inciden en conductas delictivas y con un objetivo último: la plena integración social de los adolescentes.

Por José Fuentealba Riquelme, Defensor Local Jefe de Antofagasta.

  • subir
  • imprimir
  • volver