Sala de Prensa

28/12/2011

Caso de usurpación de tierras motivó encuentro con comunidades mapuche de Liquiñe

Un equipo de la Defensoría Regional de Los Ríos asesoró en terreno la defensa de cinco comuneros, quienes fueron formalizados en octubre pasado por hurto simple y usurpación no violenta de tierras.

Un equipo de la Defensoría Regional de Los Ríos participó la semana pasada en un encuentro que congregó a distintas organizaciones sociales y a varios profesionales con vecinos de las comunidades mapuche Reinahuel y Painepe, en la zona cordillerana de Trafún Chico, en Liquiñe.

El trasfondo de esta causa indígena se relaciona con que el territorio que reclaman como ancestralmente suyo estas comunidades pertenece actualmente a la Forestal Las Vertientes. Precisamente en este escenario, en febrero pasado surgió una arista penal, cuando un grupo de familias ingresó al predio para realizar un nguillatún en un lugar considerado sagrado.

Esto derivó en un desalojo efectuado por Carabineros y en la formalización -en octubre de este año- de cinco miembros de la comunidad Reinahuel, por los delitos de hurto simple de una radio desde la casa de uno de los cuidadores del predio y por usurpación no violenta de tierras.

CRUCE DE INFORMACIÓN Durante el encuentro efectuado en Trafún, el jefe regional de Estudios, Marco Montero; el defensor titular, Luis Soto; la defensora de Los Lagos Loreto Mondión y la encargada regional de la Unidad de Apoyo a la Gestión de Defensa (UAGD), Karin Schmidt, entregaron a los comuneros información sobre el estado de tramitación de la causa, los plazos de investigación, las diligencias pendientes y las condiciones de cumplimiento de las medidas cautelares, entre otros temas.

Paralelamente, un equipo de antropólogos dio cuenta de la investigación que desarrolla  para la reconstrucción histórico-cultural de las dos comunidades, trabajo que eventualmente se complementaría con el peritaje antropológico encargado por la defensa pública y que constituiría un insumo para enfrentar la acusación en curso, iniciada por la Fiscalía de Panguipulli contra algunos miembros de la comunidad. 

Además, desde la perspectiva de la reivindicación, el equipo jurídico y de comunicaciones del Observatorio Ciudadano de Temuco se refirió a la gestiones efectuadas con miras a la recuperación de tierras a través de Conadi, solicitud que debiera ingresar al sistema y sustentarse en gran parte por esta investigación histórico cultural en desarrollo.

Para los miembros de estas dos comunidades mapuche, la reunión permitió contar in situ con todos los organismos e instituciones que los asesoran y representan en distintas materias. Para éstas últimas, en tanto, el cruce de información útil resultó fundamental para sus respectivas tareas.

Desde la Defensoría, Marco Montero relevó el valor de este contacto directo y en terreno, “lo que permite incorporar elementos culturales que enriquecen la prestación de defensa en este caso”, para luego destacar que este encuentro “responde a la preocupación e interés de la Defensoría Penal por brindar una defensa especializada y de calidad a los grupos más vulnerables de nuestra sociedad”.

PRÓXIMO NGUILLATÚN Una de las inquietudes planteadas por ambas comunidades fue la necesidad de realizar -en febrero próximo- un nuevo nguillatún en el mismo sitio sagrado situado dentro del predio en conflicto. Como respuesta, la defensa se comprometió a realizar gestiones con el tribunal de garantía, a fin de que dicho ceremonial no se considere un incumplimiento de una resolución judicial vigente. 

Al término del trewún (reunión), el lonco Manuel Reinahuel agradeció en mapudungun el apoyo prestado por los inkachefes (abogados defensores) que concurrieron a su comunidad y expresó su confianza en la labor que la Defensoría ha realizado, invitando cordialmente a sus profesionales a participar en el próximo nguillatún de febrero.

  • subir
  • imprimir
  • volver