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Permaneció 16 meses en prisión preventiva hasta que tribunal oral lo absolvió

29/12/2011

Permaneció 16 meses en prisión preventiva hasta que tribunal oral lo absolvió

Ciudadano peruano sin antecedentes penales estuvo acusado de tráfico de drogas, pero la fiscalía no logró acreditar su participación ante el Tribunal Oral en lo Penal de Ovalle.

Tras permanecer 16 meses privado de libertad, el ciudadano peruano Julián Pozo (57, foto exterior), que no contaba con antecedentes penales, fue absuelto por la unanimidad de los jueces del Tribunal Oral de Ovalle, en vista que no se acreditó su participación en una red de tráfico de drogas por la que sí fueron condenados otros dos imputados.

Durante el juicio oral, la fiscalía sostuvo que en febrero de 2010 y a través de interceptaciones telefónicas, la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones (PDI) de La Serena detectó una red que desde el norte transportaba droga hasta Ovalle.

A fines de julio de ese año, en dos operativos realizados en La Serena y Ovalle, respectivamente, los policías incautaron 49 kilos de pasta base y detuvieron a tres personas por el delito de tráfico ilícito de estupefacientes. En el caso especifico de Pozo, fue involucrado porque supuestamente debía efectuar procedimientos químicos para transformar o purificar la droga.

Sin embargo, su defensor público, Hugo Lagunas (foto interior), argumentó que tanto en el traslado como en el hallazgo de la droga, en las escuchas telefónicas y en las declaraciones de los funcionarios policiales hubo prueba alguna que acreditara notoriamente su participación. “Quedó claro que mi representado no participó en ninguna transacción, traslado, ni tampoco se le encontró droga en su poder”, recalcó el abogado.

Luego de conocer las pruebas testimoniales y periciales, los magistrados Eugenia Gallardo, Claudia Ortiz y Arturo Briceño resolvieron condenar a Pedro Ibacache y Claudio Anjel a las penas de 4 y 5 años y 1 día, respectivamente, al tiempo que absolvieron a Julián Pozo, quien permaneció privado de libertad desde el 30 de julio del 2010.

NO ERA EL “COCINERO” En la sentencia, los jueces determinaron que pese a los dichos de los funcionarios policiales en cuanto a que Pozo actuaría como “cocinero” de la droga, eso constituye sólo una hipótesis, ya que no existió ninguna acción ni participación en la cadena del tráfico en que éste haya transportado, adquirido, poseído, guardado o portado sustancia alguna.

Además, establecieron que ni siquiera se comprobó que el acusado haya tenido conocimiento de la existencia de droga.

El defensor Lagunas comentó que durante el extenso período en que permaneció privado de libertad, Pozo fue visitado sólo en dos ocasiones por su hermana, quien viajó desde Tacna, aunque lamentablemente la precaria situación económica en que quedaron su señora e hijos les impidió venir a verlo.

“Vivió momentos de tristeza y soledad muy duros que le costó sobrellevar, sobre todo que desde un principio él me señaló que su detención era un error y que no tenía ninguna participación en esta red de tráfico”, aseguró Lagunas.

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