Sala de Prensa

12/07/2007

Aysén: Mujer acusada de parricidio argumenta legítima

Un contexto de violencia intrafamiliar habrían gatillado los hechos ocurridos durante el 2005 en Caleta Andrade, provincia de Aysén, en el que una mujer dio muerte a su esposo.

El pasado lunes, en el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Coyhaique, se inició el juicio oral en el que el Ministerio Público acusa a Ana Raín Raín - procedente de Caleta- del delito de parricidio, siendo la víctima su esposo.

Sin negar los hechos acontecidos, el defensor local Luis Soto Pozo, argumenta que la mujer dio muerte a su esposo en un contexto de violencia hacia su persona.

De esta manera, mientras la fiscalía solicita una pena de 15 años y un día de presidio para la imputada, la defensa solicita se la absuelva de los cargos, considerando que Ana Raín habría actuado en legítima defensa.

De acuerdo a las declaraciones de la propia imputada, de 32 años y pescadora de oficio, a los 16 años de edad se unió a quien fuera su esposo y, durante los años siguientes fue constantemente agredida psicológica y físicamente, con golpes de puño y patadas; llegando en los últimos años a episodios de violación en su contra. En sus propias palabras "los celos sin razón y el alcohol eran el gran problema en la casa", dijo.

Cabe mencionar que la víctima y el imputado residían en Caleta Andrade, un pueblo pequeño ubicado en la isla de Puerto Aguirre, que pertenece territorialmente a la provincia de Aysén.

Los hechos

De acuerdo a lo explicado por la imputada, el 24 de noviembre de 2005 luego de volver de una faena de pesca junto a su esposo, la víctima habría comenzado a agredirla con insultos que luego se trasformaron en golpes, llegando incluso a agredir físicamente a la hija de ambos, una menor de entonces 13 años.

La mujer, tratando de frenar la violencia, habría escapado hasta la casa de un amigo de la familia donde pasó la noche junto a su hija. Al día siguiente por la tarde (25 de noviembre) su esposo habría concurrido hasta la casa donde ella se refugiaba volviendo a agredirla con insultos y golpeando su cabeza contra la pared. Ana Raín retrocedió dando la cara a su esposo hasta llegar al lavaplatos, desde donde tomó un cuchillo -que horas antes había usado en la preparación del almuerzo de su hija- sin siquiera darse cuenta de qué objeto se trataba, y lo clavó en el estómago de su esposo, que avanzaba hacia ella con claras intenciones de seguir agrediéndola, "por los nervios que tenía

-declaró Ana Raín- y el miedo, ni supe lo que había tomado, no sabía que era un cuchillo (...) fue todo muy rápido", dijo .

Desde entonces, Ana Raín ha permanecido a disposición de la justicia y a la espera de que se resuelva su caso. Luego de ocurridos los hechos se trasladó hasta Puerto Aysén primero en calidad de detenida y luego con la medida cautelar de reclusión domiciliaria, pero con un permiso especial para salir a trabajar en una pesquera, y así mantener a su hija.

Para el Defensor Luis Soto Pozo este es un claro ejemplo de lo que en psicología se llama "el síndrome de la mujer maltratada". "Estamos frente a una mujer con irreprochable conducta anterior -señaló el abogado defensor- una madre y esposa que por quince años fue objeto de golpes, malos tratos e insultos; una mujer que es celada permanentemente por lo que no puede salir de la casa sola y por lo cual -incluso- debe acompañar y trabajar con su marido en las faenas de pesca (...) una mujer que sabe que al llegar de las faenas, cuando estén en la intimidad de su hogar, será agredida por su marido (...) en ese contexto de violencia ocurrieron los hechos por los que hoy Ana Raín enfrenta el cargo de parricidio -señaló Luis Soto-. Eso es un estado permanente de agresión ilegítima que sufre la mujer y que contextualiza la legítima defensa que se alega, porque nadie está obligada a aceptar y perpetuar dichas agresiones", concluyó.

Cabe señalar que en la audiencia desarrollada hoy, asistieron como público representantes del colectivo de mujeres "Desnudando", entre otras personas ligadas al tema de género.

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