Sala de Prensa

14/07/2014

Presentó cautela de garantía en su favor

Defensoría Penitenciaria de Arica logra suspender prisión para condenado con enfermedad terminal

El sentenciado, que cumplía una condena de cuatro años por tráfico de drogas, sufre de enajenación mental y de una grave cirrosis hepática terminal, lo que le permitió a su defensa pública presentar y ganar una cautela de garantías en su favor.

Por Daniela Tapia Méndez,
Defensoría Regional Arica y Parinacota.

A través de la abogada Geraldinne Díaz y del asistente social Héctor Pérez, la defensoría penitenciaria de Arica y Parinacota logró suspender una pena privativa de libertad que afectaba a Juan Jacinto Martínez, condenado a cuatro años por tráfico de drogas, quien sufre un cuadro de cirrosis terminal que lo mantenía internado en el área de enfermería del centro penitenciario de Acha.

El caso se presentó ante el Juzgado de Garantía de Arica, vía cautela de garantías, contexto en que la defensa pidió suspender la pena privativa de libertad del condenado, dado que sufre de enajenación mental, lo cual se acreditó mediante un informe médico y psiquiátrico emitido por el Servicio Médico Legal (SML).

Frente a esta petición, el tribunal de garantía resolvió imponer una medida de seguridad correspondiente a la condición del sentenciado, como también que el saldo de la pena que lo afecta se cumpla en su domicilio, bajo el cuidado de su familia.

"GRAN RESULTADO"
Al comentar la decisión judicial, el jefe de Estudios de la Defensoría Regional, Sergio Zenteno, expresó que se trata de “un gran resultado del equipo de defensa penitenciaria de la región, pues, finalmente, nuestro cliente tendrá la posibilidad de estar junto a su familia y no en un recinto carcelario en sus últimos días de vida, con lo cual se vela por la dignidad de don Jacinto”.

De acuerdo con la motivación de la defensa en este caso, Geraldinne Díaz señaló que “el principal argumento fue su estado terminal de salud. Fue bastante complejo discutir ante el tribunal esta situación, ya que en lo que se refiere a medidas de seguridad no tengo conocimiento de que se aplicara alguna de este tipo. Respecto de la solicitud, lo que se pretendía era el cese de la pena privativa de libertad, con el fin de que el interno se pudiese ir a su domicilio atendido a su estado de salud, justificando esto en exámenes médicos que concluían que había compromiso neurológico, a lo cual se opuso el Ministerio Público en reiteradas oportunidades”.

Tras emitirse la orden de libertad del sentenciado, la defensora penitenciaria acompañó a Juan Jacinto Martínez hasta su domicilio, para entregarlo al cuidado de sus familiares.

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