Sala de Prensa

20/05/2016

En la Región de Antofagasta

Defensores y facilitadora se reunieron con la comunidad de Ollagüe

Los profesionales llegaron hasta a la lejana comuna para difundir la labor de la defensa y darles a conocer el trabajo que se está desarrollando en materia de indígenas. El encuentro se había desarrollado en años anteriores por lo que la comunidad participó activamente de la charla.

Por Julia Arriagada Marquez

Defensoría Regional de Antofagasta

Los defensores Ledy Liquitay y Mario Osorio junto a la facilitadora intercultural, Marioli Lique dejaron por un día el trabajo de oficina para llegar hasta una de las localidades más alejadas de la región, Ollagüe, poblado que se ubica a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar. Allí, incorporando a las comunidades más alejadas, entregaron información en un encuentro con comunidad.

Dicha reunión, tuvo por fin difundir la labor de la Defensoría y aclarar dudas que surgieran por parte de los comuneros y contó con la participación de una veintena de pobladores y carabineros y funcionarios de la Gobernación Provincial.

La exposición fue iniciada por la defensora juvenil Ledy Liquitay quien junto con explicarles a los asistentes el trabajo que desarrollan todos los intervinientes en el proceso penal, aclaró aspectos propios de la defensa como el sistema de cobros y las distintas especializaciones que se trabajan a nivel regional, que define un trabajo con indígenas, migrantes, mujeres y adolescentes.

“Para la Defensoría Penal todas las personas son diferentes y sus casos son particulares sobre todo si se trata de sujetos vulnerables sea por su condición, sexo u origen de allí que estamos trabajando fuertemente en evidenciar las distintas condiciones que atañen a comunidades como éstas en que la costumbre constituye un elemento relevante”, explicó la defensora.

En este contexto se refirió al porte de coca, tan usual en las festividades religiosas frente a lo cual los propios representantes de la Gobernación manifestaron que para evitar la formalización de personas que transportan materiales para los rituales, es posible que previo a la celebración soliciten una autorización la cual se les otorgará cumpliéndose con los parámetros adecuados al uso festivo.

“Esta es una información de gran relevancia para la defensa dado que abre un espacio de gestión que muchas veces puede evitar la formalización de quienes mantienen vivas las tradiciones como el challado de las casas y otras en que se utiliza la hoja de coca”, especificó el defensor Mario Osorio.

Por su parte, la facilitadora intercultural, Marioli Lique llamó a los comuneros a comprender la labor que es está desarrollando con ellos y otras agrupaciones indígenas porque ello permite visualizar asuntos tan propios de ellos como la tenencia de armas para fines de pastoreo.

“En la medida que vamos conociendo casos relacionados con costumbres y usanzas, hemos podido dar a conocer a los tribunales aspectos intrínsecos culturales  que pueden ser de gran relevancia a la hora de desarrollar una defensa indígena por lo cual es bueno contar con el apoyo de las comunidades”, especificó Marioli Lique.

De igual forma, la facilitadora destacó que la labor de la defensa indígena no solo se basa en las audiencias o el proceso penal sino también en el ámbito del cumplimiento de condenas que pueden lograrse en el medio libre y con la colaboración de las propias comunidades.

Durante toda la charla los participantes fueron muy activos a través de las consultas y contando las experiencias de algunos de ellos en estos temas y, al cabo de una hora, el equipo de la Defensoría emprendió rumbo a otros puntos, igual o más alejados del radio urbano, en un esfuerzo en difundir la labor de la Defensoría Penal.

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