Sala de Prensa

06/12/2016

Columna de opinión:

Menos prejuicios, más legislación

El siguiente artículo fue escrito por el Defensor Regional del Maule, José Luis Craig, y publicado hoy por el diario El Centro de Talca.

Por José Luis Craig M.,
Defensor Regional del Maule.

Lo único cierto de toda la batahola que se ha armado después de algunas declaraciones de candidatos a la Presidencia en el tema de los extranjeros en Chile es que el Estado chileno tiene una tremenda deuda en términos de dotar a los inmigrantes de una legislación integral y moderna, que tienda a resolver los problemas que naturalmente surgen cuando se produce la migración de una persona y su grupo familiar, por las razones que sean, desde su país de origen para afincarse en nuestro nación.

No es posible que mantengamos aún en régimen una legislación (Decreto Ley N° 1.094 de 1975, que regula el ingreso, residencia, egreso, reingreso, expulsión y control de extranjeros en Chile) afincada en la “Doctrina de la Seguridad Nacional”, dictada en tiempos muy oscuros de nuestro país, en 1975, cuando nadie en su sano juicio quería venirse a vivir a nuestro territorio.

Es decir, 40 años han pasado sin que se haya tomado en cuenta el crecimiento económico del país, la apertura internacional y la recuperación de la democracia, factores que han provocado una modificación importante en las frecuencias migratorias hacia Chile, toda vez que desde 2009 a la fecha, según cifras del Departamento de Extranjería y Migración, los extranjeros residentes en nuestro país pasaron de 289 mil 136 a 410 mil 988 personas en 2014, anotando un aumento cercano al 30 por ciento, lo que hace casi de perogrullo una modificación, actualización y modernización a tal decreto ley, que por lo menos ya se anunció como prioridad para lo que queda del actual gobierno.

El resto de los temas abordados por los candidatos, principalmente en lo relativo a los extranjeros y el delito en Chile, parecen más prejuicios que realidades si se analizan con cuidado las cifras entregadas por todas las autoridades en la materia que se reúnen en la denominada  ‘Mesa interinstitucional de acceso a la justicia de migrantes y extranjeros’.

En efecto, según las cifras oficiales dadas a conocer en septiembre por la instancia de coordinación oficial ya señalada, la cantidad de detenidos extranjeros bajó un 6 por ciento durante 2015, pues mientras en 2014 hubo 5 mil 740 personas de otras nacionalidades detenidas, el año pasado esa cifra bajó a 5 mil 415 personas.

A la estadística anterior podemos sumar que la cantidad de extranjeros detenidos disminuyó un 14 por ciento de 2014 a 2015, la cifra de víctimas extranjeras aumentó un 14 por ciento, por lo que podemos concluir que en Chile no existe ninguna relación entre aumento de migrantes y aumento de delincuencia.

Respecto de las zonas geográficas, un 77 por ciento de las detenciones de extranjeros ocurre en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Metropolitana. Sin embargo, en esas mismas regiones se agrupa más del 63 por ciento de las víctimas extranjeras, lo que es demostrativo de que no es cierta la noción de que las zonas donde existe mayor migración exista también mayor delincuencia.

Por último, si bien se ha tendido a estigmatizar a los extranjeros bajo la idea de que buena parte de las detenciones de estas personas se vinculan específicamente con el delito de tráfico de drogas, las cifras oficiales demuestran que ese tipo de delitos no supera el 11 por ciento del total de hechos por los cuales los extranjeros son detenidos en Chile.

Regular mejor el tema es lo que hay que hacer, pero con sensatez en el manejo de los números, que muchas veces no sostienen comentarios discriminatorios o prejuiciosos.

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