Sala de Prensa

19/07/2017

En penal de Coyhaique

Defensoría realizó diálogo para mujeres con hijos lactantes

En la unidad penitenciaria solo hay una mujer en esta condición. A la actividad se sumó una facilitadora que enseñó a la madre técnicas para ayudar a la relajación de la bebé y favorecer un apego sano entre ambas.

Por Valeska Olavarria G.

 Defensoría Regional de Aysén

En la Sección Femenina de la Cárcel de Coyhaique hay una habitación que desde hace más de un año alberga a la única madre con una hija lactante que permanece en esa unidad en calidad de condenada. En ese recinto, lleno de juguetes y fotografías, es donde recientemente se desarrolló un diálogo entre la defensora penitenciaria Pamela Morales, la asistente social del programa penitenciario Pamela Mansilla y la interna N.E.T.T.

N.E.T.T. fue condenada a 12 años de presidio, de los cuales ha cumplido cuatro. Hace un tiempo se casó con el padre de su hija, quien  está en el mismo recinto cumpliendo una condena similar. La maternidad en esta situación, que en todo el país es compartida por cientos de mujeres condenadas, motivó a la Defensoría Penal Pública a generar instancias de diálogo e información sobre los derechos que asisten a estas mujeres y sus hijos e hijas.

DIÁLOGO

De esta manera, la defensora penitenciaria se reunió con la madre para analizar en conjunto sus derechos como persona privada de libertad y, especialmente, como mamá de una niña menor de dos años.

“La bebé podrá permanecer con su madre hasta que cumpla los dos años", explicó Pamela Morales. "Hoy estamos trabajando para asegurar que ambas ejerzan sus derechos sin inconvenientes al interior del recinto penal, y cuando la inevitable separación ocurra,  ambas estén lo mejor preparadas que sea posible y tengan la oportunidad de mantener en el tiempo el fuerte lazo que hoy las une”, destacó.

MASAJES DE RELAJACIÓN

En una segunda etapa de esta actividad, Schlomith Neserke, facilitadora con formación en educación diferencial y terapias alternativas para niños, enseñó a la interna a hacer masajes de relajación a la bebé, de manera de calmarla cuando esté ansiosa o con molestias y favorecer un apego sano entre ambas.

“Es importante que en esta caso la madre pueda transmitir seguridad y calma a su bebé. Es como un círculo virtuoso en el que la calma de la bebé ayuda a la madre a reforzar su tranquilidad.  Esto es muy importante para el vínculo entre ambas, sobre todo en un entorno que no es el ideal para vivir esta etapa de la maternidad”, explicó la experta.

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