Sala de Prensa

21/08/2017

La actividad forma parte de la perspectiva institucional de género en la etapa de ejecución de la pena

Defensora penitenciaria dialogó sobre derechos con mujeres con hijos lactantes en penal de Valdivia

Durante la conversación, que se desarrolló en la sala de juegos contigua a la sala cuna de la unidad penal, la defensora Marcela Tapia difundió aspectos relacionados con la defensa judicial y recogió experiencias e inquietudes de dos de las tres internas que estarán con sus pequeños en el complejo hasta que los pequeños cumplan dos años.

Por Malú Rodríguez Sepúlveda,
periodista Defensoría Regional de Los Ríos

De manera coherente con el objetivo de facilitar la aplicación de la perspectiva de género en la etapa de ejecución de la pena que  incorpora el modelo de defensa penitenciaria, la defensora especializada en este ámbito Marcela Tapia visitó el viernes pasado a internas condenadas con hijos lactantes que cumplen condenas en el Complejo Penitenciario de Valdivia.

Durante la conversación, que se desarrolló en la sala de juegos contigua a la sala cuna de la unidad penal, la abogada  difundió derechos y también recogió experiencias e inquietudes de  dos de las tres  internas que estarán con sus pequeños en el complejo hasta que ellos cumplan dos años.

"Es muy importante la cercanía con esta realidad particular dentro de la defensa penitenciaria y cómo podemos ir aportando para que las singularidades de mujeres privadas de libertad con hijos lactantes puedan ser consideradas sobre la base de la coordinación, y que puedan ejercer su maternidad  y aportar al desarrollo temprano de sus pequeños de la mejor manera posible dentro de la situación carcelaria", planteó. 

Marcela Tapia explicó que actualmente tres mujeres con hijos lactantes habitan el módulo de mujeres condenadas. El encuentro se realizó con dos de ellas, pues la tercera se recuperaba de una gripe.

"Son mujeres que además de la privación de libertad deben enfrentar la preocupación sobre quién cuidará de manera cariñosa y adecuada a sus hijos concluidos los dos años del inicio de la pena. A veces esas redes están y otras veces son  débiles e inexistentes. Es ahí donde resulta crucial la oferta pública para una efectiva reinserción social que aborde estas particularidades”, reflexionó.

No obstante, hay algunas demandas que la defensora canalizaría con el jefe de unidad. Entre ellas destacó la implementación de una cálida sala cuna que posibilite que las internas puedan trabajar al interior del penal; una sala de juegos, y que cada interna ocupe una celda exclusiva con su pequeño. 

La defensora penitenciaria precisó que la situación de las mujeres con hijos lactantes se encuentra prevista en diversos instrumentos internacionales de derechos humanos, como las Reglas de Bangkok que en su artículo 42 establecen obligaciones del sistema penitenciario en relación con las mujeres. La normativa señala que el régimen penitenciario permitirá reaccionar con flexibilidad ante las necesidades de las embarazadas, las madres lactantes y las mujeres con hijos, para lo cual en las prisiones se habilitarán servicios o se adoptarán disposiciones para el cuidado del niño, con el fin que las reclusas puedan participar en las actividades de la prisión, procurando establecer programas apropiados para las embarazadas, las madres lactantes y las reclusas con hijos.

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