Sala de Prensa

18/12/2019

La joven estuvo tres meses prisión preventiva y luego en arresto domiciliario

Defensoría de Magallanes prestó apoyo legal y social a imputada embarazada

La mujer tuvo un embarazo de alto riesgo obstétrico, por lo que la Defensora Regional y la encargada de la Unidad de Apoyo a la Gestión de Defensa (UAGD) velaron en todo momento por la salud de la joven y del bebé. Finalmente fue condenada a una pena en libertad.

Por Héctor Martínez Díaz,
Defensoría Regional de Magallanes y Antártica Chilena.

Tras varios meses desde que Alejandra Saucedo, de nacionalidad boliviana, fuera detenida por un delito tráfico de drogas y luego de que tanto ella como su pareja aceptaran ser juzgados en un procedimiento abreviado, el lunes 16 de diciembre la jueza de garantía de Punta Arenas, Mónica Mansilla, dictó sentencia condenatoria de 3 años y día de cárcel con el beneficio de la libertad vigilada intensiva para ella y de 5 años y un día de cárcel para él.

La defensa de la imputada fue asumida por la Defensora Regional de Magallanes, Gustava Aguilar, y presentó un desafío particular no solo porque la imputada es una mujer migrante, sino también porque, como explicó la encargada de la Unidad de Apoyo a la Gestión de Defensa (UAGD), la asistente social Paula García, “durante el tiempo que Alejandra estuvo privada de libertad en la sección femenina de Complejo Penitenciario de Punta Arenas y luego en su arresto domiciliario, presentó un embarazo de alto riesgo obstétrico”.

Fue por lo anterior que Gustava Aguilar presentó ante el tribunal de garantía antecedentes del riesgo de salud que corrían la joven y el bebé que llevaba en su vientre por estar prisión preventiva, por cuanto el establecimiento carcelario no reúne las condiciones para proteger su salud ante eventuales complicaciones durante el embarazo, tras lo cual se le sustituyó la prisión preventiva por la de arresto domiciliario total en la casa de su hermana.

OTRAS GESTIONES
Las gestiones de la Defensoría en favor de la joven no terminaron allí. Paula García agregó que “hubo que realizar gestiones ante los organismos de salud pertinentes para que la joven sea atendida, lo que incluyó, además, que  teníamos que llevarla desde su domicilio al consultorio o al hospital para sus controles respectivos, oficiando al tribunal para que la autorizara a salir para tales efectos”.

Según la asistente social, también se logró que la mujer pudiera recibir no solo todas las atenciones sanitarias, sino también "todos los beneficios que entrega el Estado para las mujeres que dan a luz en los hospitales públicos, como el ajuar, que incluye cuna, vestuario, ropa de cama y juguetes para bebés, entre otros enseres, que son de muy buena calidad y que, de otro modo, Alejandra no habría podido tener”.

Al momento de evaluar la gestión de la Defensoría, Alejandra  Saucedo dijo “no tener palabras para agradecer el apoyo y el cariño que me demostraron la Defensora Regional y la señora Paula García, con quienes estaré eternamente agradecida, porque cuidaron de mí y de mi bebé en momentos difíciles por los que pasé. Espero ahora salir adelante y rehacer mi vida”.

Durante el juicio abreviado se dio un momento de especial emoción cuando el otro imputado en la causa, pareja de Alejandra y padre de su hijo, solicitó a la jueza poder cargar por un instante al bebé, porque no lo conocía. La jueza accedió y pidió a Gendarmería que le retiraran las esposas, para que el hombre pudiera tomar por primera vez a su hijo en brazos.

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