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Defensor público de Antofagasta suma tres meses ininterrumpidos de comparecencia al tribunal oral

03/05/2021

Desde el 24 de enero ha intervenido en cinco juicios distintos

Defensor público de Antofagasta suma tres meses ininterrumpidos de comparecencia al tribunal oral

Durante el período, Justo Veneros suma dos absoluciones, una recalificación y tres condenas muy por debajo de lo solicitado por el Ministerio Público. Además, dos de los juicios son del Sistema de Análisis de Causas con Foco Investigativo (SACFI).

Por Julia Arriagada Márquez,
Defensoría Regional de Antofagasta.

Seis meses privado de libertad estuvo un imputado que hoy fue absuelto por el Tribunal Oral en lo Penal de Antofagasta, tras ser acusado por el delito de robo con violencia. Su defensor público, Justo Veneros Palta, sostuvo su inocencia a pesar de tratarse de un nuevo juicio impulsado desde el Sistema de Análisis de Causas con Foco Investigativo (SACFI) de la Fiscalís, lo que implica un mayor número de delitos y de imputados.

Esta es la segunda absolución lograda por Veneros en este tipo de juicios. La primera se conoció a mediados de abril en un caso que incluia un supuesto secuestro de menor de edad, homicidio y otros delitos diversos. De hecho, justo cuando el abogado está cumpliendo cinco años como defensor público, completó tres meses de audiencias de juicio oral initerrumpidas.

Desde enero pasado, todos los dias se conecta con el tribunal oral en lo penal. Mientras sus colegas entran y salen de controles, audiencias programadas, juicios abreviados y otras diligencias, él comparte pantalla con tres jueces orales en jornadas de mañana y tarde.

Durante estos cinco años, Veneros ha debido enfrentar una gran cantidad de juicios. Sin embargo, la exigencia actual ha sido doble, tanto por el número de juicios como por la enorme cantidad de medios de pruebas que se han presentado en ellos.

RESULTADOS MUY FAVORABLES
Su esfuerzo ha valido la pena, ya que los resultados han sido muy favorables para las personas que ha representado. A saber, cuenta con tres absoluciones en tres distintos casos: uno por violación, otro por robo con violencia y otro por secuestro de menor de edad. También logró una recalificación de robo con violencia a lesiones y en tres casos las condenas, aplicadas a imputados que reconocieron su responsabilidad, fueron mucho más bajas que las penas solicitadas por el Ministerio Público.

“En estas circunstancias, contando tres meses de audiencias orales, lo más complejo es compatibilizar la atención de público de las demás causas que uno lleva, porque no podemos dejar de lado a los otros imputados, ya que los plazos avanzan, las familias buscan respuesta y tenemos personas privadas de libertad respecto de las cuales debemos revisar sus medidas cautelares, especialmente en este contexto sanitario. Sin embargo, cuento con la colaboración de mis colegas y eso es imprescindible”, destaca el defensor público.

José Mario Fuentealba, jefe regional de Estudios de la Defensoría, destaca que para este tipo de casos, en que un defensor público tiene dedicación casi preferente a los juicios orales, se hacen necesarias algunas medidas adicionales.

“Siempre estamos preocupándonos de equiparar la carga de trabajo de todos los defensores, pero se dan casos como este, en que la programación de juicios está muy ajustada y coincide que el mismo abogado está diariamente en audiencia en el tribunal oral, por lo que debemos delegar sus turnos de controles y de audiencias para distribuirlos entre los demás sin sobrecargarlos”, resalta.

AGOTADO, PERO CONFORME
Consultado por estos tres meses de contacto permanente con los jueces orales, Veneros reconoce que “estoy agotado, pero muy conforme, porque estamos dando lo mejor para representar adecuadamente a los imputados. A través de estas pantallas estamos definiendo el futuro de una persona y de una familia, por lo que debemos ser muy cuidadosos con nuestro actuar. Claramente, estos pequeños triunfos se deben a un trabajo en equipo”, asegura.

Justo Veneros Palta se tituló como abogado de la Universidad Universidad de Antofagasta en 2015. Se incorporó a la defensa pública el 1° de mayo de 2017, siempre conciente de que esta es la vereda en la que quiere estar. Actualmente se encuentra cursando un master en la Universidad de Jaén (España), todo lo cual lo compatibiliza con su vida familiar, junto a su esposa y a su único hijo, un pequeño de 4 años.

“La defensa pública es un desafío permanente. Siempre juegas tus mejores cartas y a veces ganas y otras no, pero siempre dejas todo en la cancha. A veces nos conformamos a nosotros mismos con el adagio 'jugamos como nunca, pero perdimos como siempre'. Sin embargo, cada caso es una persona, un imputado, una familia y nos debemos a ellos”, finaliza.

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