Sala de Prensa

23/08/2021

Visitaron el Centro de Régimen Cerrado (CRC) de Santiago

Defensora Regional y defensores juveniles respondieron consultas de jóvenes que cumplen condena

La directora regional del Sename, Carla Leal, y el director del centro, Javier Leal, mostraron a Daniela Báez y al equipo especializado la remodelación de varias dependencias del recinto, para una mejor habitabilidad de las internas e internos.

Por José Ignacio Aguirre O.,
Defensoría Regional Metropolitana Norte.

Una completa visita al Centro de Régimen Cerrado (CRC) de Santiago, durante la cual pudieron conversar con todos los adolescentes que cumplen condena en el recinto, realizó un equipo de la Unidad de Defensa Penal Juvenil (UDPJ) de la Defensoría Regional Metropolitana Norte (DRMN).

La delegación, encabezada por la Defensora Regional, Daniela Báez, e integrada por la coordinadora de la unidad, Patricia Cisternas, el defensor público Leonardo Di Doménico y la trabajadora social Carla Naranjo, fue recibida por la directora regional del Sename, Carla Leal, y por el director del centro, Javier López.

Debido a las restricciones durante la pandemia, esta fue la primera visita presencial en meses y han habido cambios en el centro. Ambos directivos del Sename guiaron un recorrido por todas las dependencias del recinto, que exhibe relevantes remodelaciones en baños y otras áreas, para hacer más grata la obligada permanencia de las y los jóvenes.

DERECHOS Y SITUACIONES PERSONALES
El CRC de Santiago tiene capacidad para recibir a 65 jóvenes, hombres y mujeres. Hoy sólo hay nueve internos condenados (5 chicas y 4 chicos). Recibe también a adolescentes imputados de entre 14 y 17 años que mantienen causas pendientes. Su director informó que el promedio de jóvenes en internación provisoria es de 15 personas, aunque al momento de esta visita no había ninguna.

Los profesionales de la DRMN conversaron primeros con las niñas. Patricia Cisternas les explicó que todas tienen derecho a postular a una pena sustitutiva, que les permita recuperar anticipadamente la libertad, pero para ello deben cumplir una serie de requisitos que exige la ley.

El equipo acompañó a las jóvenes a un taller de repostería, donde aprenden a cocinar y hornear distintos alimentos. Hay también talleres de sastrería y peluquería, entre otros, que requieren equipamientos e insumos que son aportados por el Sename. Cuando las internas e internos ya tienen un adiestramiento, deben financiar materiales, por ejemplo para cocinar. 

Por lo mismo, Daniela Báez propuso que estos productos sean ofrecidos a funcionarios de la Defensoría, para contribuir a la realización de los talleres.

Posteriormente, la delegación institucional visitó a los internos, quienes en ese momento estaban en un taller de costura, por lo que hicieron una breve pausas en su aprendizaje para manejar máquinas de coser y tijeras.

Finalmente, el equipo de defensa pública sostuvo diálogos individuales con los jóvenes, para aclarar dudas sobre sus posibilidades de penas sustitutivas.

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