Sala de Prensa

21/03/2024

En el marco del mes de la mujer

Sobre derechos penitenciarios habló la defensora pública Patricia Cuevas en radio UACh de Valdivia

En el inicio de un ciclo de conversaciones con la Defensoría Penal Pública de Los Ríos en la radio, la defensora penitenciaria conversó con el periodista Miguel Millar sobre defensa penitenciaria y las brechas de género que trasuntan desde la sociedad al espacio carcelario.

Por Malú Rodríguez Sepúlveda,
periodista Defensoría Regional de Los Ríos.

Sobre defensa especializada penitenciaria, en general y sobre brechas de género en el ámbito carcelario, en particular, conversó este jueves la defensora penitenciaria Patricia Cuevas Suárez, de la Defensoría Regional de Los Ríos, con el periodista Miguel Millar en los estudios de la radio de la Universidad Autral de Chile (UACh), en Valdivia.

Durante el diálogo, la abogada destacó que una condena con pena privativa de libertad en un estado democrático de derecho sólo significa la pérdida del derecho a la libertad ambulatoria. "La persona mantiene su dignidad y todos los derechos humanos fundamentales, como el derecho a  la salud, a tratamiento médico, a la integridad física y psíquica, a ser visitada, al arraigo familiar y -sobre todo- el derecho a la reinserción social, que debiera ser la finalidad de toda pena”, explicó.

MUJERES Y CÁRCEL
En el marco del mes de la mujer, y a propósito de las brechas de género que trasuntan desde la sociedad al espacio carcelario, Cuevas aseveró que -en efecto- los establecimientos penitenciarios están diseñados para hombres, en tanto sólo el 7,9 por ciento de la población penal está compuesta por mujeres.  

Según la abogada, el 70 por ciento de las mujeres privadas de libertad son madres de entre uno a cuatro hijos o abuelas cuidadoras y los delitos frecuentes por los que cumplen penas, como el microtráfico o la venta de drogas al menudeo, tienen que ver con esa labor: proveer al hogar sin abandonar a niños y niñas bajo su resguardo.

“En un sistema penal en que opere de manera efectiva la perspectiva de género, las privaciones de libertad, ya sea por  la medida cautelar de prisión preventiva o por pena privativa de libertad, debieran ser absolutamente excepcionales y la última alternativa para no expandir las vulneraciones de derechos a niñas, niños y adolescentes, y apostar por una efectiva reinserción social”, aseguró.

BRECHAS DE GÉNERO
Entre otras brechas de género en el ámbito penitenciario, la profesional describió la vulneración del derecho al arraigo familiar, en tanto la pena debe cumplirse siempre en el lugar más cercano posible al espacio de residencia, aunque tal como indicó, en el caso de las mujeres esto no se cumple, porque no todas las cárceles del país cuentan con una sección femenina.

De igual manera, sostuvo que en cárceles como la de Valdivia no se cumple el principio de segmentación en el módulo de mujeres condenadas, lo que se traduce en que internas primerizas habitan el mismo espacio que otras con un mayor compromiso delictual, con lo cual se potencia el contagio criminógeno, se provocan riñas y se afectan los procesos de intervención y la posibilidad de acceder a beneficios penitenciarios.

“De existir una sanción de aislamiento, no existe un módulo adecuado para cumplir esta medida y  las mujeres deben cumplirla en su propia celda, sin derecho a patio, a luz solar y con otras internas circulando por fuera, las que muchas veces realizan acciones que hacen escalar el conflicto”, advirtió.

En relación con la salud mental, Patricia Cuevas dijo que la mayoría de las cárceles cuentan con una comunidad terapéutica para el tratamiento del consumo de drogas, pero con exclusiva atención para la población penal masculina. “Las mujeres no pueden acceder a tratamiento psicológicos y muchas consumen medicamentos sin diagnóstico ni prescripción médica. Así, las brechas se van abriendo y las posibilidades de reinserción se van cerrando mucho más para ellas”, puntualizó.

LEY DE EJECUCIÓN DE PENAS
Consultada a partir de su experiencia, dijo que lo principal en el área penitenciaria, además de cuestiones técnicas, es humanizar las cárceles respetando la dignidad humana, mejorando las condiciones de habitabilidad, de infraestructura y el acceso a tratamientos de salud mental.

"Eso no es otra cosa que cumplir con los compromisos que adquirió el Estado de Chile al ratificar ciertos tratados internacionales vigentes en materia de derechos humanos, con estándares mínimos para el tratamiento de personas reclusas”, aseguró.

Invitada a una reflexión final, Patricia Cuevas habló sobre la urgencia de que el país cuente con una ley de ejecución de penas, para abandonar la subjetividad de las facultades que tiene la institución a cargo de la custodia de las personas privadas de libertad y que esta normativa delimite claramente las competencias de cada uno de los intervinientes durante la ejecución de una pena efectiva.

Revise la entrevista completa en el siguiente enlace de radio "UACh": https://n9.cl/t1s9rk

  • subir
  • imprimir
  • volver