Sala de Prensa

13/07/2012

Ninguno de los menores tenía antecedentes penales.

Tribunal Oral de La Serena absolvió a tres adolescentes acusados de robo con violencia

Los jueces Nury Benavides, Iván Corona y Analia Rojas absolvieron a los jóvenes bajo el argumento de que no existieron pruebas fundadas para inculparlos.

La falta de pruebas contundes y las contradicciones aparecidas en los testimonios de las víctimas llevaron al Tribunal Oral en lo Penal de La Serena a determinar la absolución de tres jóvenes de 14, 15 y 16 años, respectivamente, quienes fueron acusados por el delito de robo con violencia. 

En el juicio oral la fiscalía acusó a T.R.A., I.A.G. e Y.C.P. como autores de un robo ocurrido la tarde del 14 de febrero de 2012 en la playa de La Herradura. Según esa versión, los adolescentes se apropiaron de una boina y un celular que una pareja dejó junto a otras especies bajo un quitasol, mientras se tomaban fotografías. Luego de percatarse del robo, el varón los alcanzó, discutió con los menores y finalmente Carabineros los detuvo.

Sin embargo, en sus declaraciones ante los magistrados las víctimas contaron que después de sacarse fotos a orillas de la playa regresaron hasta sus pertenencias, advirtiendo que faltaban una boina y un celular. También reconocieron que no vieron a quién o quiénes sustrajeron sus cosas y que el hombre corrió tras los jóvenes inducido por los dichos de otra pareja que estaba en el lugar, según la cual “unos niños” les habían robado las pertenencias.

La defensora pública Bárbara Antivero argumentó que esa supuesta pareja que dio el aviso nunca fue indagada por Carabineros, que a los adolescentes no les encontraron las cosas sustraídas en su poder cuando fueron detenidos y que estaban en el lugar porque trabajaban en un kiosco de la playa realizando tatuajes.

“Al ser detenidos no estaban en estado de ebriedad, ellos no son consumidores de drogas, son estudiantes con actividades normales y, por sobre todo, no tienen antecedentes penales”, aclaró.

De esta forma, los jueces de la primera sala -Nury Benavides, Iván Corona y Analía Rojas-decidieron absolver a los tres jóvenes bajo el argumento de que no existieron pruebas fundadas para inculparlos, ya que las víctimas nunca los vieron directamente cometer el robo y, además, actuaron guiados por los comentarios de dos testigos que no fueron presentados como prueba por la fiscalía.

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