Sala de Prensa

29/11/2012

Positivo encuentro con siete imputadas y doce condenadas de ese recinto penal

Realizan diálogo participativo con internas de la cárcel de Los Ángeles

El Defensor Regional del Biobío, Osvaldo Pizarro, y el jefe de Estudios, Pelayo Vial, les explicaron sus derechos y el trabajo que deben desarrollar los defensores públicos.

Como suele ocurrir en parte importante del país, la Cárcel de Los Ángeles está emplazada en el casco urbano de esa ciudad, como ejemplo de una lógica que hoy ya no se ocupa para la construcción de penales.

Y aunque para muchas personas el 27/F sea sólo un mal recuerdo, para el personal de Gendarmería y en particular para las internas imputadas y condenadas de ese recinto penal es  una imagen latente y muy presente.

Ello, porque en el enorme terreno rodeado por altos muros, y que colinda con lo que alguna vez fue el edificio de los tribunales de la zona, hoy existe sólo un módulo en pie, precisamente el que alberga a la sección femenina del penal.

Tras el terremoto, estas mujeres estuvieron por un tiempo en Concepción, pero después de las demoliciones y reparaciones de rigor, el único espacio que quedó en condiciones fue precisamente el destinado a las damas, pues el resto derechamente no existe.

Por todo eso y por los 127 kilómetros que separan el único centro de reclusión para mujeres de la provincia de Biobío de la capital regional, una parte de los directivos de la Defensoría Regional visitaron a las internas de Los Ángeles, dialogaron con ellas y recogieron sus opiniones e inquietudes. 

ENCUENTRO POSITIVO
Son muy pocas en número: siete imputadas y doce condenadas, aunque eso no significa que sus necesidades de atención sean menores. De hecho, una de las internas está embarazada y otra tiene casi 60 años.

Durante el encuentro, el Defensor Regional, Osvaldo Pizarro Quezada, y el jefe de Estudios, Pelayo Vial Campos, compartieron durante una hora y 20 minutos con las imputadas de la sección, sentados en un pequeño comedor.

Pizarro y Vial les recordaron sus derechos y las obligaciones  que los defensores públicos deben cumplir con ellas y sus familias. Las mujeres entregaron su percepción sobre el trabajo de la defensa pública en la zona, sobre el trato recibido en su paso por la prisión y sobre el conocimiento real que tienen de las investigaciones en su contra, lo que fue valorado por las autoridades institucionales.

“Es otra manera de conocer in situ el trabajo de la defensa, más allá de los informes y las estadísticas. Es primordial escuchar a los y las representadas de la DPP. Ellos son el mejor indicador de cómo lo estamos haciendo”, explicó el Defensor Regional al finalizar la actividad, que contó con la cooperación del personal de Gendarmería y que culminó con el compromiso institucional de transmitir las inquietudes recogidas durante la reunión.
 

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