Sala de Prensa

04/11/2015

En tribunal de Curacautín

Absuelven a comuneros mapuche que se oponen a hidroeléctricas

El werkén Alberto Curamil Millana fue acusado por el Ministerio Púbico como autor de desórdenes públicos, por los cuales solicitó una pena de 300 a 541 días de cárcel para la autoridad mapuche.

Por Claudia Riquelme S.,
Defensóría Regional de La Araucanía.

En libertad quedaron una autoridad mapuche y otros comuneros de Curacautín, en La Araucanía, luego de que el tribunal acogiera los argumentos expuestos por el defensor penal público José Luis Correa y los absolviera del delito de desórdenes públicos por el que enfrentaron un juicio oral.

En su argumentación, el abogado puso en evidencia las contradicciones existentes en las versiones policiales y del fiscal del caso, y argumentó cada una de las acusaciones contra sus representados, contra quienes existiría una "abierta y clara animadversión" desde los acusadores, señaló.

“Se planteó la absolución por inexistencia del delito y falta de participación, toda vez que no se pudo acreditar en el juicio oral que los hechos contenidos en el requerimiento (corte de  rutas) haya generado una turbación grave en la población, que los haga constitutivos del delito de desórdenes  públicos. Por lo demás, el objetivo de la misma no era otro que mantener una oposición a proyectos hidroeléctricos que afectarán a sus comunidades, de tal forma que tampoco se cumpliría con el requisito subjetivo contenido en la norma de causar injuria u otro mal a alguna persona particular o cualquier otro fin reprobable”, explicó Correa.

Según el defensor público licitado, la animadversión de parte de una autoridad de los órganos auxiliares de la persecución penal, respecto del werkén de la comunidad, Alberto Curamil, quedó en evidencia “cuando se reconoció en audiencia que, en una reunión intersectorial entre el Ministerio Público, el Juzgado de Garantía de Curacautín,  la Defensoría y Carabineros de Chile, sindicó a dicha autoridad como una persona investigada por conductas terroristas, situación que es de una falsedad absoluta, toda vez que no ha existido ni existe en la actualidad investigación en contra de dicha autoridad por conductas que tengan el carácter de terroristas”, afirmó José Luis Correa.

OPINIÓN DEL WERKÉN
Tras su absolución, Alberto Curamil comentó que él y sus compañeros "estamos contentos por ello y queremos demostrar también que nuestra lucha es justa. No le estamos haciendo un mal a nadie, estamos reivindicando el equilibrio y el bienestar de nuestra vida, así es que eso queremos informar".

Respecto de la acusación en su contra, insistió en que "no tenemos responsabilidad en las imputaciones que se nos pretendían imponer arbitrariamente, relacionadas con desordenes públicos. Este es un doble triunfo, no para nosotros sino para nuestra causa, porque logramos sacar una central de nuestro río y esa lucha ahora se legitima con este fallo de sus propios tribunales. Por lo tanto, estamos contentos y seguiremos trabajando y luchando para que todo salga bien en defensa del bienestar que es de todos, que es el agua y la naturaleza, por supuesto", señaló la autoridad ancestral.

TERRITORIO ANCESTRAL
La acusación se remonta a una actividad de defensa del territorio ancestral y del bosque cordillerano (wallmapu) que fue encabezada por Curamil, en oposición a la construcción de la central de paso “Doña Alicia”.

El proyecto fue rechazado al día siguiente en votación del Servicio de Evaluación Ambiental, a raíz de la fuerte presión ejercida por las comunidades hacia el gobierno regional, encabezado en ese momento por el ex intendente Francisco Huenchumilla, quien votó en contra de la iniciativa por considerarla “atentatoria al derechos de las comunidades mapuche”.

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