Sala de Prensa

29/06/2017

En su balance de gestión 2016

Defensora Regional de Antofagasta destacó proyecto de defensa especializada de migrantes

Acompañada por el Defensor Nacional, Andrés Mahnke, Loreto Flores Tapia rindió cuenta de su gestión ante autoridades e invitados, contexto en que recalcó el compromiso institucional con los distintos modelos de defensa especializada para grupos vulnerables.

Por Julia Arriagada Márquez,
Defensoría Regional de Antofagasta.

Con un fuerte acento en la especialización de la defensa pública para grupos vulnerables tales como mujeres, jóvenes, indígenas y especialmente migrantes y extranjeros, la Defensora Regional de Antofagasta, Loreto Flores Tapia, rindió su cuarto balance de gestión.

Durante la ceremonia, Flores presentó las principales cifras de atención a imputados y resultados jurídicos de 2016 en esta parte del país, contexto en que destacó una baja en la comisión de delitos por jóvenes y la baja incidencia de imputados extranjeros. 

En su discurso, la Defensora Regional destacó que el año pasado la institución atendió a un 4,5 por ciento más de personas que en 2015, con un total que superó los 16 mil imputados, de los cuales 3 mil 52 eran mujeres, además de mil 287 jóvenes y mil 596 extranjeros.

También centró el énfasis de la gestión 2016 en los altos niveles de especialización que se ha alcanzado en la prestación de la defensa pública, especialmente respecto de los extranjeros.

"Durante 2016 se desarrolló en la región el proyecto de defensa de migrantes, a cargo de un equipo interdisciplinario y especializado, compuesto por una abogada defensora, una asistente social y una asistente administrativa. Antofagasta ha sido la comuna en la que este proyecto ha sido ejecutado por primera vez en el país, consolidando con excelentes resultados la labor desarrollada por la región durante los últimos años” destacó.

PRINCIPALES DELITOS
De igual forma, Loreto Flores entregó cifras respecto de la comisión de delitos. En el caso de mujeres, tal como ha sucedido en años anteriores, el hurto fue el más frecuente, pues representó el 28 por ciento del total de estos ingresos.

Le siguieron los delitos de lesiones, incluyendo aquellas producidas en el contexto de violencia intrafamiliar, con el 23 por ciento del total de los delitos cometidos por mujeres. “En este ámbito es necesario hacer un análisis respecto de los efectos que tiene la violencia intrafamiliar tanto para víctimas como para imputados”, enfatizó.

Los jóvenes, en tanto, experimentaron por segundo año consecutivo una baja en las imputaciones penales, sumandoapenas el 6,6 por ciento del total de los ingresos de la región, dos puntos porcentuales por debajo de 2015.

“Al igual que en años anteriores, los delitos más cometidos por los adolescentes continúan centrados en la propiedad. Así, el delito de hurto es el de mayor comisión en la región, lo que representa un 26 por ciento del total de delitos cometidos por menores de edad”, explicó.

En cuanto a los extranjeros, Loreto Flores dijo que corresponde "enfatizar la baja incidencia del número de imputados extranjeros en relación con el número de extranjeros residentes en nuestra región. Así, según datos proporcionados por la Policía de Investigaciones de Antofagasta, actualmente residen en la región 94 mil 946 extranjeros, por lo que el número de imputados durante 2016 sólo representó el 2 por ciento de dicha población”.

Agregó que “en cuanto al tipo de delitos cometidos por migrantes, corresponde destacar que los más cometidos fueron los delitos de lesiones, incluyendo aquellas efectuadas en el contexto de violencia intrafamiliar, alcanzando a 463 durante 2016, lo que representó un 31,6 por ciento del total de estos ingresos".

En segundo lugar, dijo, se situaron los delitos de la Ley N° 20.000, con 189 ingresos, "lo que representó un 12,9 por ciento del total de los delitos cometidos por migrantes y extranjeros”.

LOS DESAFÍOS
Además de cifras, la Defensora Regional destacó que uno de los desafíos de la institución en la zona es “seguir contribuyendo a crear una sociedad más justa, en que no solo se alcancen los necesarios cambios legislativos en materia de migrantes, sino que resulta imprescindible un cambio cultural, que se exprese en actitudes personales e institucionales para que hagan de la inclusión y del respeto al otro una constante social”.

Según Loreto Flores, “otro aspecto que nos interesa destacar es el cumplimiento de un decenio desde la dictación de la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente. La ley prometía reinserción y en eso la repuesta no ha sido del todo satisfactoria. Ésta no debiera ser, por regla general, la privación de libertad. Hemos postulado desde siempre que si una inversión se justifica, es precisamente aquella que se hace en prevención y reinserción social, especialmente urgente en los jóvenes”, finalizó.

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