Sala de Prensa

13/04/2020

Por solicitudes de revisión de medidas cautelares

Familiares de imputados agradecen el trabajo de la defensa pública en Los Lagos

Han sido los propios seres queridos de los imputados quienes han valorado el esfuerzo de la Defensoría Regional de Los Lagos por revertir sus prisiones preventivas para ayudar a reducir el riesgo de contagio de Covid-19.

Por Jorge Mansilla Macías,
Defensoría Regional de Los Lagos. 

La madre de una joven y la hija de un adulto mayor agradecieron las gestiones de la defensa pública en favor de sus familiares, en el marco del trabajo que están desarrollando los equipos de la Defensoría Regional de Los Lagos.

Actualmente, en esta zona hay alrededor de 240 hombres y mujeres que, en calidad de imputados, están privados de libertad, luego de que un juzgado de garantía decretó que esperaran el proceso en su contra en prisión preventiva y en alguno de los cuatro penales de la zona: Osorno, Puerto Montt, Ancud o Castro.

Las defensoras y defensores públicos de Los Lagos han deducido, desde el 16 de marzo, 152 solicitudes a los tribunales para revertir la prisión preventiva de las personas que se encuentran sometidas a esta medida cautelar, en el marco del plan que ha instruido el Defensor Nacional, Andrés Mahnke, para resguardar el derecho a la salud de los imputados y contribuir, además, a la prevención del contagio por Coronavirus. Gracias a ellas, 52 personas han dejado la privación de libertad que cumplían en alguno de los penales de la región, la que ahora mantienen en sus domicilios.

Bernarda Vásquez, madre de una imputada cuya prisión preventiva fue cambiada por arresto domiciliario total, manifestó su tranquilidad y agradecimiento por el trabajo realizado en favor de su hija: “Ella estaba mucho tiempo presa y por eso estoy más tranquila con que haya salido de la cárcel. Ahora debe estar en su casa todo el día, pero ya está segura. Mi preocupación era muy grande, porque ella tenía problemas de salud anteriores y temía que pudiera contagiarse mientras estuviera presa”, explicó.

El defensor público de la imputada, Rigoberto Marín, explicó que la mujer “es operada de cáncer estomacal y le era muy dificultoso seguir la dieta prescrita para su situación al interior del penal, lo que aumentaba el riesgo de su condición prevalente”. El abogado recalcó que la mujer siempre ha negado su participación en el delito por el que se le acusa, sobre todo porque existen antecedentes de participación de personas distintas en el hecho.

ADULTO MAYOR EN RIESGO
Un caso similar se registró en Puerto Montt, donde el juzgado de garantía revirtió la prisión preventiva de un adulto mayor de 72 años, quien fue derivado a su domicilio para continuar cumpliendo otra medida cautelar privativa de libertad.

Andrea Solís, hija del imputado, destacó el alivio que representa para la familia este logro de la defensa: “Él ha sufrido harto por estar preso. Es muy importante estar afuera, sobre todo por mi madre, que tiene muchas enfermedades y era muy peligroso que lo fuera a ver. Para mí fue una alegría inmensa. Ha sido muy emocionante, porque es una preocupación muy grande tener un padre adulto mayor, en riesgo y preso”.

La abogada del caso fue la defensora local jefe de Puerto Montt, Milena Galleguillos, quien destacó que el imputado no solo se situaba en un grupo de riesgo, sino que su culpabilidad es altamente dudosa.

“En el caso de don Bernardino hemos discutido siempre la existencia del delito desde la formalización de la investigación, donde se desestimó la imputación por el tribunal de garantia al revisar la medida cautelar. Se trata de una persona de 72 años con irreprochable conducta anterior, que ha colaborado desde un inicio con la investigación y cuya imputación ha sido desestimada en varias oportunidades por el juzgado de Garantía. A ello hay que sumarle el hecho de que, en esta oportunidad, pesaba aún mas el riesgo que corría su vida y que se veía incrementado por su privación de libertad”.

Finalmente, el imputado también agradeció el trabajo de la Defensoría para lograr el cambio de su medida cautelar: “Yo lo he recibido como una tremenda bendición. Le agradezco a la abogada Milena Galleguillos, que ha hecho un gran trabajo, con mucha inteligencia. Soy una persona mayor y estoy en riesgo. Ella vio ese riesgo y veló por mis derechos humanos. Se la jugó y lo logró. Me dio una alegría muy grande. Por ella estoy acá, porque cuidó de mí y de mi familia”, concluyó.

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