Sala de Prensa

29/10/2020

En La Serena

Defensoría Penal Pública e INDH visitaron módulos de mujeres privadas de libertad en centro penitenciario

La Defensora Regional y la jefa de Estudios conocieron las condiciones en que se encuentran y recibieron diversos requerimientos de las internas.

Por Daniel San Martín D.,
Defensoría Regional de Coquimbo.

Una visita a los módulos de mujeres privadas de libertad en el centro penitenciario Huachalalume, de La Serena, realizaron directivos de la Defensoría Regional y el Instituto Nacional de Derechos Humanos de Coquimbo, con el fin de conocer las condiciones de habitabilidad, tratamientos de salud y requerimientos penales de sus causas.

En la actividad participaron la Defensora Regional, Inés Rojas, y la jefa regional de Estudios de la Defensoría, Yasna Rojas, junto a la jefa regional del INDH, Tarcila Piña, y dos abogados de su equipo, quienes recorrieron los módulos 81 de imputadas, 82 de internas en conducta para postular a beneficios intrapenitenciarios, 83 de condenadas y 84 de mujeres con hijos lactantes o embarazadas.

Según la jefa de Estudios, la inspección se desarrolló en los patios y celdas, donde se constató que existen filtraciones de agua en pasillos y baños, y que en los patios no hay acomodaciones para sentarse, ni techos que brinden sombra.

“Ellas están más de seis horas al día en el patio. No pueden realizar actividades recreativas, la mayoría están tiradas en el suelo sobre toallas y algunas artesanalmente hacen toldos con frazadas para resguardarse de las lloviznas o el sol” comentó.

Como resultado de esta observación, ambas jefas regionales acordaron oficiar a Gendarmería para que informe sobre tres materias: condiciones de habitabilidad, plan de retorno de las visitas y acceso a tratamientos de salud mental de estas mujeres.

PETICIONES DE LAS INTERNAS
En los diálogos que las directivas de la Defensoría Regional sostuvieron con las mujeres privadas de libertad, éstas mayoritariamente pidieron entrevistas con defensores públicos generales o penitenciarios y orientación sobre sus respectivas causas.

Sin embargo, la Defensora Regional y la jefa de Estudios mostraron gran preocupación por la situación de seis mujeres que permanecen aisladas voluntariamente en sus celdas -por problemas de convivencia con otras reclusas- y que salen sólo una hora diaria al patio.

Inés Rojas dijo que hay dos internas que pidieron ser trasladadas a centros penales cercanos a sus ciudades de origen, pero el resto son de la zona y desean quedarse por su arraigo familiar.

“De inmediato hablamos con la autoridad del penal y señaló que desafortunadamente no disponen de otro espacio físico o módulo para reubicarlas. Se comprometió a extender su permanencia en el patio por más de una hora”, señaló.

Según los distintos parámetros observados, las directivas de la Defensoría estudiarán las circunstancias e instruirán la presentación de recursos de amparo ante el tribunal de garantía, buscando que se instruya a Gendarmería la aplicación de medidas paliativas o de acondicionamiento para mejorar las falencias detectadas.

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