Sala de Prensa

25/10/2012

Asistieron profesores y alumnos de la carrera de derecho

Defensor Regional de Coquimbo ofreció charla en la Universidad Pedro de Valdivia

A partir de la interrogante ¿santos o demonios?, Alejandro Viada explicó el importante rol que cumplen los defensores penales públicos en el sistema de enjuiciamiento criminal.

Entretenida y didáctica resultó la exposición “Defensores penales públicos: ¿santos o demonios?”, que el Defensor Regional de Coquimbo, Alejandro Viada, brindó a profesores y alumnos de la carrera de derecho de la Universidad Pedro de Valdivia de La Serena.

Con ilustrativas imágenes que graficaron el bien y el mal, Viada explicó el rol de un defensor penal público, la problemática que plantea este ejercicio dentro del sistema de justicia penal y el efecto que implica frente a sus propios colegas.

“Se suele presentar este debate entre el Ministerio Público y la Defensoría como que unos son los buenos y los otros los malos, pero no es así, cada uno cumple su papel siendo útil para la sociedad”, aclaró.

Viada planteó que el cumplimiento de la misión de la Defensoría en el resguardo de los derechos de los imputados constituye una de las partes de un trípode que pretende lograr un equilibrio con las otras dos partes, a partir del rol que juegan la Fiscalía y los tribunales.

“Acá no hay santos ni demonios, cada institución busca garantizar los derechos de las personas y la intervención de los defensores busca representar a personas vulnerables frente el poder del Estado”, explicó.

Finalmente, el directivo institucional sostuvo que pese a que los defensores públicos se ven enfrentados a un escrutinio público permanente, la existencia de la Defensoría ha resultado vital, “sobre todo en cientos de casos de personas que han sido declaradas inocentes y que han permanecido por largo tiempo privadas de libertad mientras dura una investigación”.

 

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