Sala de Prensa

23/08/2013

Sostiene que su representada no cometió delito, sino que defendía a su hijo de 13 años.

Defensora busca absolver a madre condenada por robo con intimidación

Comerciantes denunciaron un violento e intrincado incidente nocturno ocurrido en Alto Hospicio, por el que tribunal dictó veredicto de culpabilidad, pero abogada considerará eventual recurso.

Por Héctor Mérida C.,
Defensoría Regional de Tarapacá

El Tribunal Oral en lo Penal de Iquique declaró culpable a una madre acusada de robo con intimidación, quien  dice que sólo protegía enérgicamente a su hijo de 13 años. Tras escuchar tal decisión, la defensora penal pública de la mujer, Carolina Arancibia,  dijo que esperarán conocer los fundamentos del fallo para evaluar eventuales recursos.

También fue encontrado responsable el adolescente D.A.I., que estuvo con ella la noche de los sucesos y que fue representado por la defensora pública juvenil Natalia Andrade.

El caso trata de la acusación como autores directos e inmediatos de robo con intimidación en grado de ejecución frustrado, en contra de Jacqueline C.M. y un menor D.A.I.,que acompañaba al hijo púber de ésta, A.C., niño que fue derivado al Tribunal de Familia.

El acusador presentó como testigos al matrimonio de comerciantes afectados y a los carabineros que atendieron la emergencia, más un perito, documentos, 13 fotografías, un revólver a fogueo, un cuchillo y un desatornillador. La mujer tenía señalada como testigo  a una vecina que observó todos los acontecimientos de esa noche, pero ésta no concurrió por estar fuera de la ciudad.

“Para la defensa éste es un caso en que una madre – que vive una difícil condición personal - se arriesgó a salvar la integridad de su hijo de 13 años en un incidente del cual ella no era protagonista: sólo ve que desde el interior de un almacén lo golpeaban con palos e interviene con fuerza para sacarlo del sitio”, explica Carolina Arancibia. “Su convicción de que no cometió delito es tanta que la señora Jacqueline no se va del lugar una vez terminada la trifulca, sino que espera que lleguen los carabineros llamados por los comerciantes pues quiere denunciar que le golpearon a su niño, pero nadie entendió las cosas como ella las concebía”, agrega.

La defensora aclara que el incidente se produjo luego que, rato antes, la misma madre acudió al almacén “El conquistador” para sacar de allí a su hijo y a su amigo D.A.I. quienes fastidiaban a los almaceneros, pidiéndoles que les regalaran dulces. “Ella estaba en la esquina que habitualmente merodea, hasta que un conocido de la calle le cuenta que el niño A.C. molestaba en el negocio del sector, entonces va y encara a los menores, se los lleva de allí y ordena al pequeño que se vaya para la casa”, detalla la abogada.

Las cosas se complicaron luego que otro conocido de la calle le advierte que los muchachos retornaron al almacén, por lo que ella vuelve y ve a los mismos muchachos, pero ahora repelidos a palos., “Entonces sólo piensa que su niño es golpeado y enérgicamente lo defiende para sacarlo de allí, pero el altercado es severo, hay vidrios rotos, golpes y gritos. Ella grita: “a mi hijo no!".

Los comerciantes, que atienden su negocio tras una puerta de rejas de fierro, expusieron que para robarles la madre los amenazó, el adolescente de 17 años sacó un revolver y que el niño rompió cosas con su desatornillador, por lo que muchas especies quedaron esparcidas en el suelo.

Minutos después llega una patrulla de Carabineros que escucha los testimonios de los denunciantes y detiene a la madre que la espera al interior del almacén. Más allá ubican al adolescente portando el arma a fogueo, luego recogen un desatornillador y un cuchillo en el suelo del recinto, constatando también que no hubo mercaderías perdidas.

“Yo quise demostrar que es verdad lo que mi representada me narró, y que la versión y sentimientos de esta madre deben ser considerados dentro del contexto en que acontecieron los hechos”, concluye la defensora penal pública. La profesional destaca, por ejemplo, que una de las víctimas reconoció en juicio que el cuchillo mencionado en el procedimiento policial no era portado por la imputada, sino que era del negocio.

La lectura del fallo que contiene los fundamentos jurídicos de la condena se realizará el próximo 28 de agosto.

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