Sala de Prensa

17/07/2014

Carta al director de La Tercera del Defensor Regional Metropolitano Norte

Crítica a tribunales chilenos (*)

Leonardo Moreno se refirió a la detención de dos sospechosos chilenos por la detonoación de un bomba en España y las razones por las que ambos fueron absueltos en el llamado 'caso bombas'.

Señor director:

En editorial publicado recientemente, La Tercera critica “a los tribunales chilenos” comparando el caso bombas y el juicio que se inició hace poco en España por una detonación en una iglesia de Zaragoza. Si bien llama la atención que haya dos imputados chilenos que se repitan en ambas causas, citar algunos datos sin relevancia jurídica para vestir la tesis de solidez técnica resulta excesivo.

Si en Chile no ha sido posible lograr condenas es porque los hechos no calzan con el tipo penal descrito en la Ley Antiterrorista. La norma exige probar que los autores tienen la intención de desestabilizar al régimen democrático y que las detonaciones -que en Santiago fueron nocturnas, de corto alcance y sin personas cerca- provocaran efectivamente terror en la población. En Chile no se probó eso, ni que los imputados hayan participado en los bombazos. Esto fue analizado en numerosas audiencias en que participaron varios jueces orales, de garantía y de la Corte de Apelaciones, donde la fiscalía perdió en todas las instancias por la ausencia de pruebas.

Es común que cuando hay delitos que repugnan a la sociedad, actores políticos y medios de comunicación exijan culpables sin considerar el daño colateral. En el caso bombas 15 personas fueron formalizadas y sometidas a prisión preventiva -algunos más tiempo que los chilenos en España- la que sólo se sostuvo mientras duró el secreto de la investigación que permite excepcionalmente la Ley Antiterrorista. Cuando después de ocho meses el secreto se levantó, las defensas y luego el tribunal, pudieron apreciar la fragilidad de las pruebas y comenzó el derrumbe del caso.

Sin conocer detalles de la investigación española se ha conocido un video que ubica a la pareja en la estación de buses de Zaragoza el día de la detonación. Pero no hay ni imágenes, ni testigos que los hayan visto en la Basílica del Pilar, ni tampoco se encontraron rastros biológicos de ellos (la imagen que los muestra en un templo es de 11 días después, en el Monasterio Montserrat). Pruebas y leyes muy distintas a las del juicio realizado en Chile, por lo que la comparación resulta injusta. Y más injusto aún es que de paso se cuestione la absolución de las restantes 13 personas declaradas inocentes en el caso bombas.

Leonardo Moreno Holman,
Defensor Regional Metropolitano Norte.

Noticias relacionadas:


  • subir
  • imprimir
  • volver