Sala de Prensa

31/08/2018

En la sede Talca de la Universidad Autónoma

Dictan charla sobre estándares en derechos humanos en el proceso penal

Jefe de la Unidad de Derechos Humanos de la Defensoría Nacional, Tomás Pascual Ricke, expuso sobre estas materias ante defensores penales públicos y abogados invitados.

Por Edgardo Castro Vega,
Defensoría Regional del Maule.

“Estándares de derechos humanos en el proceso penal” se denominó la charla ofrecida en la Universidad Autónoma de Chile, sede Talca, por el jefe de la Unidad de Derechos Humanos de la Defensoría Nacional, Tomás Pascual Ricke, actividad presidida por el Defensor Regional del Maule, José Luis Craig, a la que asistieron defensores públicos, académicos, abogados y estudiantes.

Pascual explicó los sistemas de protección internacional en materia de derechos humanos, a fin de que los defensores públicos comprendan los estándares de defensa vinculados a ese ámbito en el proceso penal, en aspectos tales como el debido proceso, la integridad y la libertad personal.  

“Es muy importante que los estándares que ha entregado el sistema interamericano de protección de derechos humanos puedan ser empleados por las defensoras y defensores públicos, a objeto de incorporar más herramientas al debate y, de esa manera, exigir a los tribunales un ejercicio de ponderación, en conformidad con los instrumentos ratificados por el Estado de Chile que se encuentran vigentes y que pueden ser aplicados en el proceso penal”, afirmó.

HERRAMIENTAS PARA DEFENSORES
El abogado reiteró que esta charla se inserta en la necesidad de entregar herramientas a todos los defensores públicos para desarrollar una línea de argumentación que obligue a los jueces a realizar un control de convencionalidad.

José Luis Craig destacó luego la calidad y pertinencia de la exposición, a la luz de la puesta en funciones de la recientemente creada Unidad de Derechos Humanos de la Defensoría Penal Pública.

“Si bien puede parecer un contrasentido, crear una unidad para algo que es de la esencia de nuestro trabajo desde la creación de la Defensoría, era una deuda orgánica que debíamos pagar. En efecto, todos los servicios públicos deben crear una unidad de derechos humanos y la Defensoría no la tenía. Sin perjuicio de aquello, siempre ha sido y será parte de nuestra misión el profundo respeto de la dignidad humana”, concluyó.

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