Sala de Prensa

03/04/2020

En la región de O’Higgins

Defensor Regional visitó a imputados y condenados de la cárcel de Rancagua

Junto con revisar las instalaciones desde donde se están llevando a cabo las entrevistas por videoconferencias entre defensores públicos e imputados, Claudio Aspe conversó con los internos para conocer las medidas preventivas ante el Covid-19.

Por Andrea Contreras Márquez,
Defensoría Regional de O'Higgins.

Más de 2 mil personas, hombres y mujeres, permanecen recluidas en el complejo penitenciario de Rancagua, lo que corresponde al más del 70 por ciento de la población penal de la región de O’Higgins. Hasta ahí llegó el Defensor Regional, Claudio Aspe, para revisar las condiciones de privacidad y comunicación de las salas desde donde los internos e internas realizan las videoconferencias para las audiencias y entrevistas con sus defensores públicos. Además, visitó algunos módulos para conversar directamente con las personas privadas de libertad.

Respecto de las instalaciones, Aspe quedó conforme con la calidad de recepción de video y audio de los equipos computacionales dispuestos por Gendarmería para este objetivo. “Hicimos algunas pruebas y me pareció que la calidad de la comunicación es apropiada para que los internos participen de las distintas audiencias, así como que mantengan las entrevistas con sus defensores o con los peritos”, señaló.

GARANTIZAR LA PRIVACIDAD
Además, solicitó al alcaide, mayor Álvaro Millanao, garantizar la privacidad que debe tener cada privado de libertad en las instancias de conversación con sus abogados y con los profesionales que realizan peritajes. Según el oficial, eso se le ha exigido a sus funcionarios, de manera de respetar los derechos de los encartados.

Posteriormente, Aspe visitó el módulo de mujeres lactantes, donde permanecen las embarazadas y madres de menores de 2 años, para contarles sobre las solicitudes de cambio de medidas cautelares para ese tipo de imputadas que tramita la Defensoría.

El Defensor Regional visitó luego un módulo de condenadas y otro de condenados, para conocer las condiciones sanitarias con las que cuentan, a propósito de la pandemia de Covid-19, y dar respuestas a sus inquietudes sobre las posibilidades de conmutar penas.

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