Sala de Prensa

28/03/2013

Pese a ello, su defendido quedó en prisión preventiva

Defensor público cuestionó pruebas de la fiscalía en formalización por 11 asaltos

Ricardo Flores explicó que a pesar de que la Fiscalía pudo presentar pruebas científicas -como huellas digitales-, fundó su causa sólo en reconocimientos fotográficos.

El defensor público Ricardo Flores cuestionó la fragilidad de las pruebas presentadas por la Fiscalía en contra de su representado, Sergio Antonio Contreras González (31), pues una vez más fundó su acusación en un mero reconocimiento fotográfico, pese a que pudo presentar pruebas mucho más confiables.

Efectivamente, el fiscal Arturo Gómez formalizó al imputado como autor de once asaltos a farmacias ocurridos en el centro de Santiago, de los cuales siete fueron  perpetrados este año. Argumentó que las víctimas de los delitos identificaron al imputado a través de reconocimientos fotográficos.

Agregó que con la orden de detención respectiva, Contreras González fue aprehendido en la calle portando una mochila, en cuyo interior había un arma a fogueo y una polera con las mismas características reconocidas por las víctimas. Concluyó que existen videos y fotografías de cámaras de seguridad donde se muestra el accionar del imputado.

Por todo lo anterior la fiscalía solicitó al juez de garantía, Marcelo Rojas, que decretara la prisión preventiva del detenido.

PRUEBAS CIENTÍFICAS
Flores cuestionó las pruebas del Ministerio Público, ya que su acusación se fundó esencialmente en los reconocimientos fotográficos, omitiendo así presentar antecedentes más confiables, en referencia a pruebas científicas como las huellas dactilares.

El abogado explicó en audiencia que ello era perfectamente posible en este caso, ya que el video captado por las cámaras de seguridad durante uno de los asaltos muestra que el autor del delito se apoyó con sus manos en varias superficies del local afectado, pese a lo cual la policía no registro huellas digitales.

Añadió que las víctimas que reconocieron a su defendido destacaron la existencia de cicatrices en cabeza y brazos en el sospechoso descrito, cosa que está a la vista que no existen en Contreras González.

En definitiva y pese a estos argumentos, el tribunal acogió la solicitud de prisión preventiva y decretó un plazo de investigación de cien días.

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