Sala de Prensa

06/11/2013

Loreto Flores, Defensora Regional de Antofagasta en su Cuenta Participativa

“Nuestro compromiso es acompañarlas en todas las etapas del proceso y más allá”

En el Centro Penitenciario Femenino de Antofagasta la Defensora Regional se reunió con imputadas y condenadas para exponerles sobre la gestión institucional y atender sus consultas

Por Julia Arriagada Márquez
Defensoría Regional de Antofagasta

En una intensa jornada en que las reclusas de la cárcel de mujeres de Antofagasta aprovecharon al máximo, la defensora regional de Antofagasta, Loreto Flores cumplió con su Cuenta Participativa 2013, instancia en que renovó el compromiso institucional con las mujeres privadas de libertad.

El Centro Penitenciario Femenino (CPF) de Antofagasta es un recinto que ya forma parte de la historia de la región dado que es el recinto penal más grande destinado sólo a mujeres. Allí conviven más de 150 internas entre imputadas y condenadas, algunas de las cuales además son extranjeras. Este fue el escenario elegido por la Defensora Regional, Loreto Flores para exponer su Cuenta Participativa, en la cual destacó que “quienes se encuentran privados de libertad son ante todo personas y aún más, si se trata de mujeres y, además, extranjeras que se encuentran lejos de su país, familia y redes de apoyo, merecen particular atención”.

En la actividad, que se realizó en el comedor del patio 2 del CPF, participaron también el Jefe de Estudios (S) Ignacio Barrientos y la Encargada de la Unidad de Apoyo a la Gestión de Defensa, Valentina Acuña además de la funcionaria Paola Garrido y la alumna en práctica de Servicio Social, Natalia Pérez.

La jornada se inició con la exposición de la defensora regional, quien explicó a las internas el rol de los defensores y la relevancia que tiene para la institución garantizar el respeto de sus derechos, especialmente en relación a recibir un trato digno y sin discriminación, no ser objeto de torturas o tratos crueles, ni tampoco de castigos sin un proceso justo, recibir atención médica, efectuar peticiones a su Alcaide u otra autoridad y, sobre todo, su derecho a un abogado defensor, con el que pueden entrevistarse de manera privada.

Capacitación Permanente

Al respecto, Loreto Flores destacó que el compromiso de la Defensoría no sólo dice relación con la representación en audiencias sino que se extiende a todos los ámbitos ligados al proceso penal e, incluso, alcanza aspectos sociales y familiares ya que la privación de libertad en que se encuentran, reviste por sí misma una condición de vulnerabilidad especialmente si están alejadas de sus hijos, sus redes de apoyo y, en algunos casos, de su país de origen.

“Los defensores penales están siendo permanentemente capacitados para enfrentar temáticas tan relevantes como los aspectos psicológicos y sociales que derivan de la imputación penal. Incluso, en el último tiempo se han desarrollado cursos que abordan los aspectos propios de la Ley de Extranjería para enfrentar con más y mejores herramientas situaciones que van más allá de lo estrictamente jurídico”, resaltó Loreto Flores.

En una segunda etapa de la jornada, fue la propia Defensora Regional quien atendió todas de las consultas de las internas. A pesar de la gran cantidad de requerimientos, Loreto Flores atendió pormenorizadamente a cada una de las interesadas en exponerle su caso y  orientó algunos casos particulares por lo cual las beneficiarias expresaron su agradecimiento y destacaron la importancia de la visita ya que les permite visualizar con mayor confianza y cercanía a las autoridades de la institución.

“Para nosotras siempre es bueno recibir la orientación de quienes conocen de los temas que nos preocupan y se les nota la disposición a estar siempre acompañándonos tanto  en las audiencias como en las demás etapas del proceso. Además, con este tipo de actividades nos queda más claro que contamos con gente que sabe y que quiere ayudarnos”, comentó la interna de iniciales S.V.M.

Así, después de casi dos horas en que el salón comedor del patio 2 del CPF Antofagasta se transformó en una suerte de consultorio jurídico, las internas volvieron a sus actividades habituales pero muchas de ellas con mayor optimismo frente a sus casos específicos, a lo menos por haber sido escuchadas en sus demandas por la propia defensora regional.

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