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Tribunal rechazó prisión preventiva de brigadistas de campaña municipal imputados por homicidio frustrado

26/02/2015

Por incidente ocurrido en Peñalolén en 2012

Tribunal rechazó prisión preventiva de brigadistas de campaña municipal imputados por homicidio frustrado

Sin el respaldo de la Fiscalía, el activista ambiental Mariano Rendón -tío del menor agredido- pidió la prisión preventiva de los brigadistas de los comandos UDI y DC, a lo que se opuso el defensor público Cristián Medina.

Por José Ignacio Aguirre O.,
Defensoría Regional Metropolitana Norte.

Cerca de la medianoche del 27 de octubre de 2012 en la intersección de las avenidas Américo Vespucio y Orientales, en Santiago, se produjo un incidente en que el joven Luciano Rendón –que a la fecha tenía 17 años- resultó con graves lesiones, que incluyeron una fractura de cráneo.

Su familia, asesorada legalmente por el abogado y activista ambiental Mariano Rendón –tío de la víctima-, iniciaron una larga batalla, hasta que lograron que el fiscal Miguel Ángel Orellana formalizara a cuatro brigadistas de los comandos de los candidatos a las elecciones municipales de ese año.

El fiscal Orellana expuso ante el 13° Tribunal de Garantía que la noche de los hechos había dos camionetas en la citada intersección, una con tres personas del comando de la UDI y una de la Democracia Cristiana, que tenían la misión de proteger la propaganda ilegal que habían instalado en ese espacio público.

En esa contexto y junto a unos amigos, Luciano Rendón llegó a retirar y destruir los afiches electorales, momento en que fue atacado violentamente por Francisco Gómez Arévalo, Manuel Ortiz y Julio Encina, del comando de la UDI, y Gonzalo Concheso, del de la DC.

Según el fiscal, hay dos peritajes que acreditan que el joven fue golpeado con elementos contundentes como un fierro o un bate de béisbol, y por eso las lesiones fueron tan graves que obligaron a mantener a la víctima con ventilación mecánica y a someterlo a una cirugía para colocarle una placa de titanio para remplazar parte de su corteza craneal.

Por eso, Orellana los formalizó por el delito de homicidio frustrado y solicitó para ellos las medidas cautelares de firma quincenal, arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima.

Sin embargo, si bien coincidió con la argumentación de la fiscalía contra los imputados, el querellante Mariano Rendón solicitó la prisión preventiva de los imputados, ya que su sobrino ha recibido amenazas, por lo que la libertad de los acusados representa un peligro para la víctima y para la sociedad. Esto fue respaldado por la querellante del Ministerio del Interior.

DEFENSA ARGUMENTA IMPRECISIONES
El defensor penal público Cristián Medina, patrocinante del imputado Julio Encina, se opuso a la solicitud de los querellantes, argumentando que las imputaciones de la Fiscalía son imprecisas y no cumplen con los estándares que exige la ley.

Agregó que la acusaciones son de carácter general y no existe precisión acerca de quién hizo qué en la agresión. Ello, sin descartar la tesis de la defensa particular de los restantes tres imputados –que requerirá un peritaje independiente-, según la cual el joven fue víctima de un atropello.

Terminado el debate, el tribunal resolvió rechazar la solicitud de prisión preventiva de los querellantes, decretando en cambio las medidas solicitadas por la Fiscalía para los imputados: firma quincenal, arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima.

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