Sala de Prensa

14/10/2016

En segundo juicio contra acusado en Tribunal de Puente Alto

Testigos eximen de responsabilidad a acusado de homicidio por “bala loca”

Tal como ocurrió en el primer juicio oral en contra de Samuel López Sandoval, la llamada testigo clave del caso, eximió de responsabilidad al principal acusado de la muerte de la pequeña M.S. de 7 años, víctima de una bala loca en el año nuevo del 2014, en la comuna de Puente Alto.

Por Gustavo López Valeria,
Defensoría Regional Metropolitana Sur.

Durante las últimas jornadas la testigo presencial y los 'de oídas' sostuvieron que no habían visto al acusado disparar al aire en las afueras de su casa, ratificando la declaración hecha en el anterior juicio oral. Gema F. -la testigo presencial- afirmó que había mentido en sus dichos ante el fiscal y las policías, por presiones que había sentido de parte de los detectives que la interrogaron.

La declaración de la testigo no es nueva y ya había sido conocida en el primer juicio contra Samuel López, versión exculpatoria que sirvió para absolver al acusado en junio de este año.

La novedad de las últimas jornadas estuvo en la declaración de los dos testigos 'de oídas', quienes no se presentaron en el anterior juicio oral y que indicaron que ellos habían escuchado por terceras personas los dichos de la supuesta testigo presencial, situación que ahora calificaron como “solo un rumor o cahuín”.

Se espera para la próxima semana los alegatos de clausura y veredicto para el caso, que ya absolvió en junio pasado a Samuel López, quien permaneció 22 meses privado de libertad por un delito que, según sus dichos, no cometió.

DECLARACIÓN DEL ACUSADO
Durante la primera jornada del juicio oral, el acusado relató qué había hecho el día del homicidio de la menor de edad: "A las 10 y media u 11 de la noche (del 31 de diciembre de 2013) comencé a hacer asado, porque yo le regalo la cena a mi familia. Como soy cocinero, me gusta hacerla a mí. Ahí nos fuimos al patio, yo en ningún momento salí de la casa", señaló esta mañana el imputado, quien lamenta el estigma social que le ha acarreado el proceso.

"Ahora yo voy a cualquier lado, en la calle, y ya no soy Samuel López, el cocinero número uno. Mientras no termine el juicio y se demuestre mi inocencia, sigo siendo el acusado de la bala loca", dijo el hombre.

Durante los días de audiencia de juicio oral, la defensora penal pública Yazmín Herrera ha indicado que se está frente a un mal procedimiento de la policía civil y que la investigación tuvo una visión de túnel, con un solo sospechoso, sin explorar otras alternativas.

"No corresponde que la policía esté tomando declaraciones a la gente en un auto, a oscuras en la noche, sin lectura de derechos, sin decirle que está siendo imputado", señaló la abogada.

"Mi representado fue sacado de la casa y nunca le dijeron que era imputado, más bien era como un testigo, donde se escribe una declaración con lápiz mina que a él no le permiten leer y luego lo hacen firmar y él lo hace. No hubo peritajes ni a su ropa ni a sus manos, ni tampoco hubo hallazgos de vainillas cerca. A la vez, no hay arma (homicida)", afirmó la defensora penal pública de Puente Alto.

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