Sala de Prensa

17/12/2018

Generosa y tradicional campaña cumple diez años

Funcionarios de la DRMS llevaron la Navidad a sala cuna de la cárcel de San Joaquín

La iniciativa, que por décimo año consecutivo organizan los funcionarios y funcionarias de la Defensoría Regional Metropolitana Sur, está dirigida a los niños y niñas que se encuentran con sus madres en ese Centro Penitenciario Femenino (CPF).

Por Gustavo López Valeria
Defensoría Regional Metropolitana Sur

Durante diez años y de manera ininterrumpida, el Viejo Pascuero ha visitado a las internas que se encuentran en el Centro Penitenciario Femenino (CPF) de San Joaquín, especialmente a aquellas de la sección Sala Cuna, donde las mujeres se encuentran acompañadas por sus hijos menores de dos años.

Esta vez, 20 mujeres y sus hijos e hijas recibieron la tradicional visita de la delegación de funcionarios de la Defensoría Regional Metropolitana Sur (DRMS) a la cárcel de San Joaquín, con la idea de entregarles un momento de felicidad que ayudara a olvidar el lugar en que se encuentran.

La comitiva estuvo encabezada por el Viejo Pascuero y sus ayudantes, incluida la Defensora Regional Metropolitana Sur, Viviana Castel; la coordinadora de defensa penitenciaria de la DRMS, Sandra Haro; la profesional Liliana Hermosilla, de la Unidad de Estudios, y abogados del equipo de defensa penitenciaria, entre otros.

Los funcionarios compartieron con las internas y sus hijos, momento en que afloraron las emociones y sentimientos propios de estas fecha, pues muchas de ellas tienen hijos pequeños que viven con familiares y a quienes sólo puede ver un par de veces al mes, explicaron algunas internas.

Como es una tradición de diez años, los pequeños recibieron regalos y pañales, gracias al generoso aporte de los funcionarios y colaboradores de la Defensoría, quienes fueron motivados por la comisión organizadora, que nuevamente llevó alegría a los internos más pequeños de la cárcel de San Joaquín.

SALA CUNA "RAYITO DE SOL"
La sección sala cuna del CPF de Santiago está pensada para que las internas puedan estar con sus hijos e hijas desde recién nacidos y hasta cerca de los dos años, con el fin de asegurar el apego materno en el primer año de vida. Igualmente funciona en las dependencias anexas la sala cuna “Rayito de Sol”, que entrega a los niños y niñas el mismo trato que recibirían si estuvieran en una instalación extramuros.

Los 17 niños y niñas, así como sus mamás, disfrutaron de un trozo de torta que los funcionarios y funcionarias de la DRMS prepararon, dejando para el final la sorpresa más esperada de la visita del Viejo Pascuero, quien entregó regalos para los más pequeños residentes del centro penitenciario y sus mamás.

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