24/04/2012
Columna de opinión:
Sobre el aumento de la criminalidad
El siguiente artículo, publicado hoy en El Mercurio de Antofagasta, fue escrito por la jefa de Estudios de esa Defensoría Regional.
Sobre los índices de la criminalidad y la sensación de victimización de la ciudadanía, es posible afirmar que la misma ha ido en aumento. Si bien en comparación con otros países de la región estas cifras resultan menores, resulta difícil disminuir los números en materia de delincuencia.
La pregunta que naturalmente surge es ¿qué está sucediendo? ¿Cómo puede enfrentarse? y la respuesta -la primera que se otorga- es aumentando la penas y, por cierto, las sanciones de encierro. Sin embargo, la fuerza de la realidad demuestra que esta no es la solución.
El tema es de gran complejidad y requiere ser abordado desde diversas perspectivas. Son imprescindibles análisis desde los planes de desarrollo social, de educación, de reinserción y -por cierto- en materia penal, las salidas alternativas a la cárcel.
La gran modificación a la Ley 18.216, sobre cumplimiento alternativo de las sanciones penales, se dirige en dicho camino ¿Qué quiere decir esto? Algo bastante razonable, que no todos los delitos tienen igual sanción o producen el mismo daño en las personas o en la sociedad. Recordando la tragedia en la cárcel de San Miguel, se pudo constatar que en un mismo “pabellón” había personas por robos y otras por no pago de multas, lo cual no resulta razonable.
La idea entonces es otorgar formas de cumplimiento más flexibles en los delitos de baja lesividad y que –eventualmente- igualmente acarrearían una sanción en privación de libertad.
Lo anterior, en clara armonía con el profundo daño que acarrean las sanciones de encierro de corto plazo, lo que implica pérdida de la fuente laboral, empobrecimiento del grupo familiar y, para el afectado, un pronto reingreso a la sociedad en condiciones muy desfavorables, lo cual naturalmente incentiva a seguir en una escalada criminal.
Por el contrario, una sanción alternativa, que igualmente es sanción traducida en trabajo comunitario, o el seguimiento de ciertos programas sin las consecuencias negativas de un encierro de corto plazo, han demostrado disminuir las cifras en reincidencia y, al mismo tiempo, responsabilizar a la persona por el delito que cometió.
Por Loreto Flores Tapia,
jefa de Estudios Defensoría Regional de Antofagasta.
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