Sala de Prensa

30/11/2012

Revisaron el emblemático caso de Gabriela Marín con el Defensor Regional

Estudiantes del Liceo “Oscar Castro” debatieron sobre la protección del imputado

Alberto Ortega entregó una cuenta pública participativa ante los alumnos, centrada en un debate de fondo: eficientismo versus garantismo.

Los estudiantes de tercero medio del liceo “Oscar Castro” de Rancagua se reunieron con el Defensor Regional de O’Higgins, Alberto Ortega, para analizar en un debate abierto el tema de “La protección del imputado: eficientismo versus garantismo”. Esto, en el contexto de una cuenta pública participativa organizada por esa sede regional de la DPP, cuya finalidad general es captar la percepción de un público en torno a temas penales de interés.

Precisamente con el objetivo de posicionar el tema en discusión, los profesionales de la DPP pusieron en el tapete el caso de Gabriela Marín, una parvularia de San Fernando que se suicidó tras saber que habían quedado en libertad  los supuestos autores de una violación agravada en su contra.

Luego, el periodista Carlos Carrasco, de Radio Bonita FM de Rancagua, hizo una exposición sustentada en el tratamiento de la información y explicó cómo el llamado ‘Cuarto Poder’ se ha visto manejado por quienes integran el ‘Quinto Poder’, es decir los movimientos sociales o ciudadanos.

Carrasco aseguró que los medios de comunicación requieren capturar a la opinión pública y hacerla partícipe de la noticia a través de diferentes tópicos, que se manejan desde las sensaciones de los individuos.

Posteriormente el Defensor Regional, Alberto Ortega, explicó a los jóvenes que cada defensor público debe velar por su cliente, ya sea adulto o adolescente, para que se apliquen plenamente los principios del proceso penal: que todo imputado sea tratado como inocente, que esté garantizado el juicio previo; que éste cuente con igualdad de fuerzas para sostener su punto de vista frente a las imputaciones que se le formulen y que, cuando corresponda, se le aplique una sanción justa.

A partir de ello, cada defensor se compromete a representar judicial y extrajudicialmente a su imputado en todas las actuaciones y audiencias hasta la completa ejecución de la sentencia, a realizar visitas a la cárcel para entrevistarse con su defendido, a efectuar y solicitar diligencias pertinentes a la defensa, a solicitar las pericias que se requieran y a atender a los familiares para los fines de la defensa.

POSTURAS CONTRAPUESTAS
En cuanto al debate de fondo, Ortega dijo que el mundo se está moviendo en medio de dos grandes posiciones en  tensión. La primera -conocida como garantismo penal o como el derecho penal de ciudadano- supone la necesidad de juzgar al sindicado de cometer un delito bajo dos finalidades específicas, el conocimiento de la verdad y el respeto de las garantías procesales. Ello, al punto que no tiene sentido -y por lo mismo se considera ilegítimo- un procedimiento penal que obtenga la verdad de los hechos con el desconocimiento de las garantías procesales del ciudadano.

La segunda posición es la del eficientismo penal -conicida también como ‘derecho penal del enemigo’- y supone la lucha contra la impunidad a toda costa, aún con el desconocimiento de garantías procesales, bajo el entendido de que el delincuente es un enemigo para la sociedad y ésta -a través del poder del Estado- tiene el deber de sancionarlo.

Una vez aclaradas las posiciones, los estudiantes comenzaron a debatir y aclarar dudas en torno a varias causas emblemáticas ocurridas en la zona, como los casos de Gabriela Marín, Absenta y Johnny Herrera, entre otros.

La estudiante Tamara González, por ejemplo, expuso que existe una relación simbiótica entre los medios y la opinión pública, aunque aclaró que los individuos tienen la capacidad racional para determinar qué tipo de  información leer, opinar y juzgar.

La alumna agregó que la ciudadanía adolescente siente que no hay un proceso de participación inclusivo, sino más bien un bombardeo de información que, en vez de aportar a su formación, genera mayor incertidumbre por desconocimiento de la información.

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