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Comenzó juicio oral por abuso sexual y robo con violencia a parvularia de San Fernando

07/04/2015

Se extenderá por dos semanas

Comenzó juicio oral por abuso sexual y robo con violencia a parvularia de San Fernando

Dos acusados hay en esta causa que provocó conmoción pública por el suicidio de la víctima, Gabriela Marín Mejias, días después de la formalización de los supuestos culpables.

Por Andrea Contreras Márquez
Defensoría regional de O'Higgins

En el tribunal oral de San Fernando se inició pasadas las nueve de esta mañana el juicio oral contra dos jóvenes de 29 años acusados por abusar sexualmente y robar las especies de una joven de 23 años de San Fernando.

Los hechos materia de este juicio se remontan al el 7 de agosto del año 2012, cuando Carabineros recibió la denuncia de la víctima que indica que un sujeto la abordó en el centro la ciudad conduciéndola bajo amenaza a un sitio eriazo ubicado a un costado de vía férrea, donde otros dos hombres la esperaban para golpearla, robarle y abusar sexualmente de ella.

Tres sujetos fueron detenidos esa misma noche y posteriormente fueron trasladados al Tribunal de San fernando para controlar su detención, oportunidad en la que quedaron en libertad, con la medida cautelar de prohibición de acercarse a la víctima.

Ya van casi tres años desde que ocurrieron los hechos y a la fecha ya se ha decretado orden de no perseverar en el caso de Bruno Ruiz Díaz. En tanto, se acusó a Y.P.C y C.B.B por robo con violencia y abuso sexual agravado, delitos por lo que están siendo juzgados en el Tribunal Oral en lo Penal de San Fernando.

Durante la primera jornada se escucharon los relatos de apertura de la fiscalía, la parte querellante y la defensa, para posteriormente, escuchar el relato de la primera testigo del Ministerio Público, María Raquel Salas, quien fue la persona que auxilió a Gabriela Marín tras las agresiones.

El defensor de la causa, Cristian de la Jara Fuentes, espera una absolución para estos jóvenes pues está seguro de su inocencia, no obstante señala que” si hacemos memoria, este fue un caso en el que hubo muchos errores y no existe ninguna prueba directa, todo lo cual hoy no permite sentar en el banquillo de los acusados a los verdaderos culpables de las agresiones sufridas por Gabriela Marín”.

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