Sala de Prensa

09/06/2016

El conocido sacerdote jesuita visitó la Defensoría Regional de Antofagasta:

Felipe Berríos: “Ustedes no pueden abandonar su sueño de hacer una sociedad más justa”

Conocido por predicar con la acción, el religioso compartió una amena charla con los funcionarios de la defensa pública, para contarles cómo es la vida en un campamento de Antofagasta e instarlos a seguir trabajando por las personas más vulnerables

Por Julia Arriagada Márquez,
Defensoría Regional de Antofagasta.

Fue una jornada intensa, dedicada a la reflexión y análisis en torno a la sociedad, desde lo cotidiano y con mirada crítica. Participaron todos los funcionarios que tienen desempeño en la Defensoría Regional y Local de Antofagasta.

El grupo se reunió en torno a un personaje particular, que habla sin tapujos y expresa lo que piensa siempre después de una reflexión. Así es Felipe Berríos, el conocido sacerdote jesuita que hoy vive en un campamento de la ciudad y que ahora visitó a los profesionales, técnicos, asistentes y auxiliares que trabajan en la defensa pública de imputados.

“Nadie dijo que era fácil. Hacer las cosas que otros no quieren y evaden es un gran desafío y defender a quienes la sociedad desecha no siempre es sinónimo de popularidad y comprensión. Por el contrario, cuando personas de gran valor como ustedes deciden provocar el cambio a través del respeto y la dignidad de otros, sin duda están haciendo un gran trabajo y los felicito por eso”, destacó el sacerdote, que en muchas ocasiones ha provocado polémica por sus críticas a distintas instituciones, incluso la propia iglesia católica.

DESAYUNO PREVIO
Berríos llegó a la cita luego luego de aceptar la invitación que la Defensora Regional, Loreto Flores, le hizo cuando lo visitó en el campamento. “Compartir un desayuno con el padre fue un privilegio que debíamos corresponder. Por ello lo invitamos a conocer a las personas que están detrás de la defensa penal pública y compartir los sentimientos que embargan esta labor ,que nos plantea grandes desafíos diarios”, destacó la Defensora Regional.

Durante el diálogo, tanto defensores como funcionarios expresaron a Felipe Berrios las preocupaciones que derivan de la comisión de delitos, muchas veces vinculadas al consumo problemático de drogas, falta de apoyo familiar y, en general, una serie de circunstancias que determinan las conductas ilícitas.

“No me cabe duda que la criminalidad no debe ser atacada con armas ni encierro sin sentido, sino que debiera estar en manos del sistema de salud, donde se puedan explorar tratamientos adecuados de adicciones y asuntos más vinculados con la salud mental. No podemos seguir permitiendo que jóvenes y adultos que llegan a la comisión de delitos por su falta de atención hagan de la agresión y la violencia una forma de vida”, destacó el sacerdote.

Berríos destacó también que la labor de la defensa es primordial para seguir construyendo una sociedad justa e igualitaria, dado que “con el esfuerzo de cada uno de ustedes se puede avanzar para vivir en un país en que todas las personas sean tratadas como tales, con iguales derechos, iguales necesidades y, sobre todo, con la misma calidad de ser tales".

El religioso pidió a los funcionarios institucionales que "no abandonen ese sueño de defender a los más desposeídos, los abandonados, los vulnerables. Ese es el sueño que puede contribuir a una mejor sociedad”, concluyó, tras lo cual prometió una próxima visita.

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