Sala de Prensa

04/06/2018

En diálogo participativo realizado en el CDP de Ovalle

Defensora Regional de Coquimbo valoró positiva evaluación de imputados a defensores públicos

Junto al defensor local jefe de la ciudad, Inés Rojas atendió consultas de 35 internos que cumplen prisión preventiva en ese recinto.

Por Daniel San Martín D.,
Defensoría Regional de Coquimbo.

Un importante diálogo participativo sostuvo la Defensora Regional de Coquimbo, Inés Rojas, con 35 imputados internos en el Centro de Detención Preventiva (CDP) de Ovalle, quienes hicieron consultas sobre sus causas y evaluaron positivamente la calidad de los defensores públicos de esa zona.

Acompañada por el defensor local jefe de esa ciudad, Gerardo Tagle, Rojas comentó que la Defensoría Penal Pública ha modernizado y ampliado sus servicios de defensa.

“Partimos hace 17 años, representando sólo a personas imputadas. Hoy tenemos abogados especializados que representan a personas condenadas, indígenas, adolescentes, inimputables y extranjeros”, dijo.

Agregó que esto demuestra que la institución ha mantenido una constante preocupación por brindar un servicio de defensa de alta calidad, con profesionales que en toda circunstancia del proceso penal velan por un trato digno y respetuoso, independiente del tipo de delito imputado, si la persona cuenta o no con antecedentes penales y sin importar su origen, etnia, nacionalidad, identidad sexual o creencias.

BUENA NOTA
“Ahora quiero escucharlos a ustedes, ¿tienen dudas sobres sus casos?”, preguntó Rojas.

El caso planteado por Miguel, imputado de robo por sorpresa, fue el de mayor complejidad. El interno pidió rebajar la caución de 600 mil pesos impuesta por el tribunal y que su defensor público disponga de una asistente social para acreditar su precaria condición económica.

Gerardo Tagle le explicó que su abogado, Hugo Lagunas, ya había solicitado una pericia social y que, “además, ya gestionó una audiencia de revisión de su prisión preventiva, que fue fijada para el viernes 8 de junio”, apuntó.

Otros internos pidieron ser visitados con mayor frecuencia por sus defensores, para recibir nuevos antecedentes de sus causas. En ese sentido, Rojas explicó que de acuerdo con instructivos de la institución, los defensores penales públicos deben visitar cada 15 días a los imputados en prisión preventiva, en tanto los defensores penitenciarios concurren una vez al mes a visitar a los condenados.

Al finalizar, la Defensora Regional preguntó directamente a los imputados ¿”cómo creen que los defienden”? Sin ahondar en detalles, en general los imputados expresaron una positiva evaluación de los defensores, dijeron estar conformes con sus abogados y destacaron que son “peleadores” en audiencias, que casi siempre logran sacarlos a la calle y que tienen "harta experiencia".      

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