Sala de Prensa

12/11/2018

En encuentro por casos de responsabilidad penal adolescente

Jóvenes recluidos en el CRC de La Serena pidieron sustitución de sanciones

El equipo de defensa penal adolescente de la Defensoría Regional de Coquimbo desarrolló una ronda de entrevistas personalizadas con jóvenes infractores que cumplen sanciones en régimen cerrado.

Por Daniel San Martín D.,
Defensoría Regional de Coquimbo.

Sustituciones de las sanciones que actualmente cumplen y traslados a otras unidades fueron los principales requerimientos planteados al equipo de defensa penal juvenil de la Defensoría Regional de Coquimbo durante un encuentro con adolescentes infractores en el Centro de Régimen Cerrado (CRC) de La Serena.

La jornada fue encabezada por la defensora penal juvenil Paula Pérez, quien fue acompañada por la asistente social Mónica Saavedra y el funcionario administrativo Juan Leiva y consistió en entrevistar de forma personalizada a catorce internos –13 hombres y 1 mujer- que, según la abogada, mayoritariamente consuman condenas por quebrantamiento de sanciones del régimen semicerrado.

BUENA CONDUCTA
Pérez puntualizó que siendo el principal requerimiento la sustitución de sanciones, explicó a los jóvenes que ésta consiste en modificar la condena que actualmente ejecutan en régimen cerrado, siempre y cuando tengan un alto porcentaje de cumplimiento de actividades en sus planes individuales de intervención y, por consiguiente, acaten el propósito del artículo 20 de la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (LRPA), que apunta al fin rehabilitador de la sanción.

“Se ha innecesario y desproporcionado mantenerlos encerrados coartando su resocialización en la comunidad y su entorno familiar. Se aplica una sanción inferior, que puede ser libertad asistida especial o régimen semicerrado”, aclaró.

La abogada agregó que también recibieron peticiones de traslados de unidad penal a otras ciudades, donde según los adolescentes solicitantes cuentan con apoyo familiar, que ampliará las posibilidades de mejorar su conducta.

En este sentido, en las conversaciones con cada joven el equipo RPA de Coquimbo advirtió las consecuencias negativas de los informes de conducta, sobre todo el registro de faltas graves, porque además de la denegación del tribunal para acceder a una sustitución, arriesgan el traslado a la sección juvenil de la cárcel de Huachalalume, donde se cuenta con las mismas condiciones de apoyo social, psicológico, talleres y capacitaciones que existen en el CRC.

“Les exigimos que asistan a la escuela, ser respetuosos con profesores y educadores, evitar conflictos con otros internos. Si hay consumo de drogas, que participen de un programa de rehabilitación y, lo principal, que si tienen permisos de salidas no reincidan en delitos y regresen en días y horarios establecidos”, concluyó.

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